Luego de criticar el aumento de las dietas de los senadores nacionales, el presidente Javier Milei firmó un decreto para ascender de jerarquía a funcionarios de su Gabinete, entre ellos a su hermana Karina Milei, quienes ahora cobrarán como ministros.
Tras el ascenso del vocero presidencial, Manuel Adorni, el secretario de Prensa, Eduardo Serenellini, recibió el rango de ministro. Lo mismo sucedió con la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y el secretario de Legal y Técnica, Dante Herrara Bravo.
En todos los casos, los ascensos fueron oficializados a través de un decreto presidencial, el DNU 337/2024, que consideraba “necesario adecuar el rango y jerarquía” de cada uno de los funcionarios. “La medida propuesta resulta impostergable para la gestión del Gobierno”, añadía el texto.
A contramano del lema “No hay plata”, el preferido de los libertarios, el Gobierno nacional aumenta los recursos discrecionales y los salarios de sus propios funcionarios. El martes pasado, a través de la decisión administrativa 207/2024 publicada en el Boletín Oficial, la secretaria General de la Presidencia había recibido más fondos para pagar salarios.
Así, la Secretaría encabezada por Karina Milei recibió un total de $40.685.552 más para sueldos. Lo que no se sabía en ese momento es que parte de ese dinero estaría destinado a su propio aumento salarial.
Mientras tanto, el Ejecutivo mantiene su postura de no homologar los acuerdos salariales entre cámaras empresariales y sindicatos, mayores a la inflación, aduciendo que ello provocaría una aceleración en el aumento de precios.
En otras palabras, a pesar del discurso anti-casta, el oficialismo parece sostener que las subas salariales de los trabajadores generan más inflación pero no así los incrementos de la dirigencia política.
Fuente: Diagonales.
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