El ex titular de Enarsa, Agustín Gerez, detalló ante la prensa sobre las inversiones y obras canceladas para la generación de energía eléctrica, de las cuales algunas iban a realizarse en Formosa, cuya consecuencia directa se podrá ver en el verano, ante cortes programados de luz que ya fueron anunciados por el Gobierno de Javier Milei.A esta situación, se suma que el presupuesto 2025 no prevé inversiones importantes sobre el sector y solamente plantea una suba tarifaria. La carencia para proyectar inversiones evidencia que no hay una meta definida, lo que hace pensar que el problema energético no es un objetivo a resolver al menos en el corto plazo para el Gobierno, más allá de plantear los cortes de luz programados y el depender de países vecinos como una “solución”.En ese sentido, es la sociedad la que sufre y sufrirá la cancelación de obras, sobre todo en los sectores más alejados de los grandes centros urbanos del país, como se pueden notar en las obras canceladas en Formosa que estaban destinadas a favorecer a zonas alejadas de la capital provincial.
El corte de luz anunciado por un gran ajuste
El Presidente Javier Milei ha destacado en varias oportunidades que su gestión ha hecho el ajuste más grande de la historia argentina, y este objetivo sin dudas tuvo también su correlato en materia energética, sobre todo en lo que hace a la obra pública. Según la ejecución presupuestaria de la Secretaría de Energía, los gastos de capital (que básicamente son los destinados a obras) cayeron en enero un 77,2%, tendencia que siguió durante los meses siguientes ya que en julio esta caída fue del 62,4% (siempre a niveles interanuales), lo cual deja en evidencia que hubo una gran desinversión y paralización de la obra pública relacionada a la energía.
Otra de las partidas es la asignación para la ampliación de las redes eléctricas, en la que se puede observar que no se usaron fondos, puesto que el gasto asignado es 0,0%. En suma, en lo que va del año, el recorte de partidas también se vió en materia energética, por lo que hay una responsabilidad evidente de la gestión actual.
El anuncio de los cortes programados
Guillermo Francos, jefe de Gabinete, anunció que habrá cortes de luz durante el verano debido a la alta demanda y mencionó que la Secretaría de Energía está planificando de antemano un esquema de interrupciones en el servicio eléctrico. El funcionario atribuyó esta situación a la falta de inversión y al retraso en las tarifas por parte del kirchnerismo.
“Se supone que si viene un verano de mucha temperatura puede haber una demanda muy alta de electricidad y lamentablemente no ha habido inversiones en estos últimos tiempos, con lo cual va a faltar generación y va a tener que programarse algún corte, sobre todo hacer algunos acuerdos con los sectores productivos, sectores industriales”, indicó el jefe de Gabinete. Desde otro sector del Gobierno, se dejó entrever que se buscará gastar en la importación.
Al cruce de Francos, en una entrevista radial esta mañana, el ex presidente de Enarsa, Agustín Gerez criticó a la gestión libertaria por el aumento de tarifas de los servicios públicos, advirtiendo que esto no mejorará la calidad del servicio, especialmente tras la confirmación de posibles cortes programados en el sistema eléctrico para el verano, que como principal razón tiene detrás a la cancelación de las obras energéticas ya proyectadas.
“Algo que el Gobierno anterior resolvió fueron dos cuellos de botellas que había respecto al sector energético: uno fue la construcción del gasoducto Néstor Kirchner -que al día de hoy le propició un superávit o va a propiciar en la balanza energética de 3.000 megas- y después planificó la construcción de 3.000 megas térmicos es decir, generación a partir de gas, para poder abastecer cuestiones sensibles de la República Argentina”, señaló.
Gerez respondió las acusaciones de Francos y ejemplificó algunas de las medidas del gobierno libertario. “Asumido este Gobierno (de Milei) y con la licitación ya adjudicada no se prosiguió el trámite administrativo para la firma de los contratos y, como consecuencia de ello, en julio de este año salió una resolución de la Secretaría de Energía que finalmente cancela esa licitación”, explicó en referencia a la Resolución 151/24 de la Secretaría de Energía que canceló las centrales térmicas en todo el país, incluyendo las que iban a realizarse en Formosa y que tenían ya una empresa adjudicada para su construcción.
“¿Cuál es la consecuencia? La consecuencia es que hoy al sistema le faltan para abastecer el verano 3.000 megas que se va a traducir en alrededor de un millón y medio de hogares afectados en diferentes puntos de la República Argentina”, advirtió el ex presidente de Enarsa.
Gerez lanzó una dura crítica a la actual política energética del gobierno de Milei y destacó que “la primera conclusión a la que arribamos es que estamos pagando tarifas como las principales potencias europeas y que eso no se traduce en lo que el Gobierno esperaba que se tradujera y que el mercado propiciara la solución de cortes de energía eléctrica”.
El ex funcionario subrayó que las recientes decisiones del gobierno, como la cancelación de inversiones por 4.000 millones de dólares y la cancelación de plantas térmicas a través de la licitación TerConf, están teniendo repercusiones negativas. “Estos tres mil megas implicó inversiones por 4.000 millones de dólares que, inexplicablemente y pese a la advertencia de la totalidad del sector energético este gobierno, termina dando de baja y las consecuencias las va a terminar pagando la sociedad”, aseguró.
El norte no existe para Milei: las obras canceladas en Formosa
Estas plantas térmicas a las que hizo mención Gerez iban a realizarse en distintos puntos del país, por lo que su planificación tenía una mirada federal; dos de ellas se iban a construir en la ciudad capital e Ibarreta las cuales iban a generar 120 MV cada una, destinados al Sistema Argentino De Interconexión (SADI). No fueron las únicas obras energéticas al costado norte de la Patria que fueron canceladas y que podrían haber aportado a evitar la falta de generación energética.
La falta de estas obras tendrá consecuencias generalizadas en todo el país, pero particularmente afectarán a distintas zonas de Formosa alejadas de la capital provincial, que iban a tener acceso a un mejor servicio eléctrico.
Entre estas obras fundamentales que fueron canceladas estaba la ampliación de la Línea de Alta tensión 132kV que conecta al Gran Formosa, Pirané e Ibarreta y con la cual 423.000 habitantes de la provincia iban a contar con un servicio de mayor calidad capaz de abastecer el incremento de demanda para los próximos diez años. El financiamiento de esta obra tenía los aportes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) y el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Asimismo, otra de las cancelaciones nacionales recayó sobre la línea de suministro de energía para todo el sistema, que iba de Guarambaré a Clorinda, a la cual el gobierno nacional actual se negó a volver a poner en operación. Esta se trataba de una línea que iba a permitir 150 megawatts.
Por último, fueron canceladas las obras para concretar la “Línea de Media Tensión 33-13,2 kV Alimentación Planta de Bombeo Acueducto Santa Rita, Paraje Campo Grande – El Mistolar” aludiendo razones de emergencia económica-financiera.
La instalación de la Línea de Media Tensión era para brindar el servicio eléctrico las 24 horas a familias originarias y criollas de las comunidades y parajes ubicadas a la vera del canal Santa Rita, desde el río Bermejo hasta Ingeniero Juárez e iba a garantizar el bombeo de agua cruda desde el río Bermejo hasta la planta de agua potable de Ingeniero Juárez, beneficiando a más de 30 mil habitantes de la zona con la provisión de energía y fortaleciendo el acceso al agua.
La falta de planificación tiene consecuencias sobre la sociedad: aumento de tarifas
Gerez también alertó sobre los efectos de la mala gestión gubernamental y afirmó que “la novedad que estamos observando es que una mala decisión del gobierno como es la cancelación de este proceso licitatorio se la terminan trasladando a la sociedad porque ahora lo que están manifestando es vamos a hacer incrementos tarifarios”.
A su juicio, esta situación no sólo se traduce en aumentos de tarifas, sino también en “cortes rotativos”. Es decir, descartó que la situación se deba a un retraso tarifario sino a la falta de obras ya planificadas, por lo que el aumento en los precios no traerá solución alguna.
Asimismo, el ex titular del organismo de energía expuso un panorama preocupante: “Estamos frente a un escenario donde el suministro eléctrico se va a ver afectado como se veía afectado allá por fines de los años 80, entonces esto es un mix entre la peor política de los años 90 con lo peor de los años 80”.
Basándose en que no hay proyecciones para generar más obras y teniendo como única solución la importación, faltando algunos meses para el verano la situación es preocupante, no solamente por lo que ocurrirá en los primeros meses del 2025 sino en que lo que se avizora es una pérdida de soberanía energética y sus consecuencias económicas.
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