Está confirmado que durante el verano Argentina no producirá la energía eléctrica suficiente para abastecerse de electricidad, una situación compleja donde el país se enfrentará a grandes apagones, que tienen distintas causas detrás. Sin aún informar públicamente una solución, desde el Gobierno nacional se dejó entrever que para evitar los cortes de luz se dependerá de la importación. Tiempo atrás fue la misma gestión nacional que canceló iniciativas para generar energía.
Entre las causas que hacen a la situación compleja es que la central nuclear Atucha I dejará de operar para tareas de mantenimiento para extender su tiempo de vida útil. Daniel González, secretario de Coordinación de Energía y Minería confirmó que la Central Nuclear Atucha I se detendrá en las próximas semanas para llevar a cabo una obra de extensión de su vida útil; la detención prevista por 30 meses generó inquietudes en el gobierno ante la proyección de un consumo eléctrico que podría alcanzar los 30.700 MW entre febrero y marzo de 2025.
Esto significa que la central no contribuirá al suministro energético durante el verano. A pesar de la preocupación por la generación de energía, González descartó la posibilidad de cortes programados, asegurando que el gobierno trabaja para mitigar riesgos en el sistema.
Enfatizó que no habrá cortes de luz programados como los que ocurrieron en la década de los 80, y que la situación dependerá de factores climáticos y de la capacidad de generación de países vecinos como Brasil, es decir, se dejó entrever que la solución será la importación (lo cual obviamente será posible solamente si los vecinos desean vender energía).
Cancelación de iniciativas para generar energía
Más allá de Atucha I, lo cierto es que fue la propia gestión nacional la que decidió no avanzar en iniciativas que hubieran ayudado a la generación energética.
A inicios de mes, la Compañía Argentina del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) ha notificado a las distribuidoras provinciales que la generación de energía no alcanzará para cubrir la demanda, lo que podría resultar en cortes programados diarios si no se implementan ajustes. Las previsiones revelan que en Argentina podría haber un consumo eléctrico de 30.700 MW entre febrero y marzo de 2025. En febrero de este años se llegó a consumir un poco menos: 29.653 MW.
Si bien se señala que se trabaja para mitigar la situación, lo cierto es que la propia gestión ha accionado contra iniciativas que iban a aportar a la generación. Por ejemplo, se canceló la licitación TerConf de la Secretaría de Energía, que preveía la ampliación del parque termoeléctrico en 3.340 MW. En cuanto a esta licitación, en Formosa se iban a concretar la ejecución de dos centrales térmicas en la ciudad capital e Ibarreta, las cuales iban a generar 120 MV cada una, destinados al Sistema Argentino De Interconexión (SADI).
En esta provincia, además, se paralizó la construcción de la Nueva Planta de Uranio (NPU) que tenía un 70% de avance. Si bien el Jefe de Gabinete nacional, Guillermo Francos, negó esto, en la actualidad, la planta de Dioxitek en Formosa opera sólo en un modo mínimo de seguridad. Además, la falta de financiamiento nacional llevó al despido de personal técnico y profesional.
Esta paralización también pone en peligro al sistema energético nacional. La complementación de la planta en Formosa con la actual en Córdoba era crucial para mejorar la eficiencia y asegurar el suministro continuo de combustible nuclear necesario para las centrales de Atucha I, Atucha II, y Embalse.
Preparándose para los cortes de luz
En las provincias ya se da por hecho la falta de energía para el verano. El gerente de REFSA (distribuidora de Formosa), el ingeniero Benjamín Villalba comentó hace semanas que “estamos alertando a la población de las notificaciones que tenemos desde CAMMESA, en las cuales están advirtiendo que la generación de electricidad no va a cubrir el consumo. O sea –remarcó-, la generación no va a cubrir la demanda” de los usuarios.
“Están anoticiándonos de que van a haber temperaturas muy altas y que los consumos van a ser realmente un poco más que el año pasado, y nos están advirtiendo de esa situación”, añadió.
La preocupación por posibles apagones ha aumentado, especialmente tras el incremento de tarifas este año. Las disputas entre funcionarios del área económica y las empresas de transporte y distribución reflejan la complejidad del problema, que se centra en la generación. En respuesta a esta situación, el Gobierno Nacional planearía publicar un “plan de emergencia” para mitigar los riesgos en el suministro eléctrico en las próximas semanas.
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