Teresita Luciana López (35) era abogada y militante por los derechos de las mujeres y la erradicación de la violencia de género, a su vez trabajaba en un centro de estética en donde el pasado 18 de septiembre su ex pareja, Sergio Patricio Galván (31), efectivo de la fuerza policial de Formosa, le quitó la vida usando el arma reglamentaria.
Si bien la causa avanza de manera efectiva ante la Justicia, ayer amigos de ella marcharon desde la Plaza San Martín hacia el Mástil Municipal para llamar a la sociedad e instituciones a tomar conciencia y accionar ante la violencia de género.
Realizaron una caminata desde la Plaza San Martín en donde participaron allegados, colegas y ciudadanos comprometidos con la causa, hasta la costanera capitalina.
En el caso subyace una realidad desgarradora como lo es la violencia de género y por ello la movilización se enfocó en llamar a la sociedad a involucrarse ante las señales de violencia.
Marlene Bermúdez, abogada y amiga de Teresita, comentó a NEA HOY que “ella ayudó a personas cercanas que sufrieron violencia de género. Para nosotros, nos llena de orgullo marchar en su nombre”.
“Lo que queremos es que la muerte de mi amiga no haya sido en vano, que deje un cambio en la sociedad”.
Sofia, vocera en la caminata y ex compañera de estudios de Teresita, expresó que “queremos dejar en claro que es para tomar conciencia una vez más sobre lo que implica un femicidio, que empieza con estadíos de violencia. Lo importante es involucrarnos como sociedad, como amigos, como parientes, tanto de la víctima como el victimario”.
Y remarcó “necesitamos dejar en claro a la sociedad que no se puede seguir minimizando la violencia del hombre hacia la mujer y que las familias de los violentos deben actuar también”.
La caminata finalizó en el Mástil municipal en donde se encendieron velas, y se dirigieron algunas palabras en su memoria.
La importancia de la salud mental
En este marco, se puntualizó que es necesario el tratamiento para la salud mental como método de prevención, una cuestión que “era considerado un tabú” en tiempos pasados.
“Esto tiene que se tratado, desde que mandamos a nuestros hijos al jardín, debe ser una prioridad. Hay que romper esto del ‘No me meto’, sobre todo cuando se ve que una pareja se está violentando. El derecho de la mujer es un derecho humano. Es fácil hacer la vista gorda y decir que ‘se encargue la justicia’. Debe haber un cambio, sobre todo en el ámbito intrafamiliar”, destacó Marlene.
“(…) contribuyamos e involucrémonos como seres humanos ante los hechos de violencia. No podemos seguir aceptando, apañando, minimizando la violencia hacia la mujer que tiene una víctima cada 40 horas en nuestro país (…)”
“Fue un caso atroz”, indicó al respecto del hecho y su impacto en la comunidad formoseña. “Hizo un clic en la sociedad, no solo en la familia de Tere o la justicia, sino en los ámbitos donde ocurre la violencia”.
El violentómetro
Durante la caminata se utilizó el violentómetro para graficar signos de alerta ante un caso de violencia de género.
Se trata de un material en forma de regla que muestra cuáles son manifestaciones o actitudes de violencia que pueden estar presentes en la vida cotidiana, y en que en ocasiones no se conocen o se confunden.
Justamente Galván, antes de cometer el femicidio, estuvo mucho tiempo hostigando, amenazando y controlando a Teresita, a pesar de que la relación había terminado.
Cómo denunciar casos de violencia
Las mujeres que se encuentren en el territorio de Formosa atravesando una situación de violencia de género pueden comunicarse con la Secretaría de la Mujer vía telefónica al 3704-436372 o a los números corporativos 3705-042460; 3705590763 , también se dispone del correo electrónico [email protected]. A nivel nacional se encuentra disponible la línea #144.
El caso
El victimario, Sergio Patricio Galván, ex efectivo de los servicios en la Asesoría Letrada de la fuerza policial de Formosa, y ex pareja de la joven, ingresó el pasado 18 de septiembre alrededor de las 9:00 horas al centro de estética donde ella trabajaba, y usando el arma reglamentaria le disparó y después se propinó un tiro en el rostro.
Teresita, quien además se desempeñaba como abogada, había manifestado ese mismo día a sus familiares que radicaría la denuncia por acoso. El hombre fue trasladado al Hospital Central y actualmente permanece detenido.
El femicida ya fue dado de alta, por lo que continúa la causa, que según estimaciones podría terminar en una condena a cadena perpetua.
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