Más de 190 millones de votantes depositaron su decisión en las urnas durante estos comicios presidenciales en Estados Unidos, donde la disputa entre Trump y Biden llegó al día final con polémicas y fuego cruzado. Esta fue la 52da edición de las elecciones para presidente de los Estados Unidos y estuvo marcada por la inestabilidad debido a las declaraciones polémicas del Presidente Trump y denuncias públicas en medio del recuento de votos. En este marco, el Partido Demócrata, representado por Joe Biden, se hizo con las elecciones de este 2020, recuperando el gobierno luego de una administración republicana.
En las últimas horas del martes, el candidato Donald Trump rompía con todas las encuestas previas superando a Biden y encaminandose a una reelección casi segura.
Con los primeros rayos del sol del miércoles, la tendencia empezó a revertirse cuando algunos Estados bisagra como Georgia empezaron a inclinarse por Joe Biden y los distintos recuentos de votos empezaron a finalizar en Arizona, California o Nueva York, donde el electorado respaldó a los demócratas, inclinando la balanza frente a Trump.
¿Por qué tardaron tanto en el recuento de votos?
Lo cierto es que el escrutinio definitivo suele tardar unos días, pero la tendencia irreversible es conocida poco menos de 24 horas cerrada las urnas, esto suele ser así en casi todas las democracias del mundo. En este caso, las declaraciones prematuras de victoria de Donald Trump generaron una cierta inestabilidad electoral, ya que muchos estados decidieron realizar el recuento de los votos por correo (los votos no presenciales) por último, dejando un gran margen para cambiar la realidad.
La Cámara Electoral de los Estados Unidos reveló el resultado final este sábado, confirmando que Joe Biden será el presidente más longevo en asumir la presidencia del país, debido a que cuando asuma el cargo, tendrá 78 años.
¿Cómo será el traspaso del poder?
El clima electoral durante los debates y las elecciones no fue el mejor, para entenderlo, sólo debemos tomar medidas como el Dow Jones, que es un índice de la Bolsa de Valores de Wall Street, que se desplomó 400 puntos cuando Trump se adelantó, cerca de las 5 de la mañana del miércoles, asegurando su victoria.
Este contexto se suma a un estado muy crítico de un sistema de salud colapsado por la pandemia del COVID-19, siendo el país más afectado de todos, superando los 235.000 muertos.
Además, por si fuera poco, los distintos estados donde el apoyo a Trump es más radical como en Florida o el interior de Texas, esperan violentas manifestaciones para estas últimas semanas del actual presidente al poder, como precaución, los comerciantes ya taparon sus vidrieras para protegerlas del vandalismo.
Como punto positivo, Joe Biden ha demostrado ser un hombre mesurado, heredero de una dialéctica política demócrata cultivada por 40 años de carrera y una gestión como vicepresidente, lo que hace pensar que su calma podrá estar por encima de la tensión generada por su contrincante.
Otro dato destacable es que, por primera vez en la historia presidencial, Estados Unidos tendrá una vicepresidenta mujer. Se trata de Kamala Harris, abogada de 56 años.
Lo cierto es que Joe Biden asumirá en enero el mando de la Casa Blanca en medio de una pandemia, una crisis laboral e inestabilidad social mientras que sus electores buscan una rápida vuelta a las medidas de bienestar que suele tomar el Partido Demócrata en sus gobiernos.
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