El último informe de la consultora Economía y Regiones expuso que la actividad de la construcción en Argentina enfrenta un panorama desalentador, con cifras que indican un nuevo desplome interanual en agosto de 2024.
El consumo de cemento se redujo un 26,4% y marcó su décima caída consecutiva en la crisis en este sector primordial para la economía que viene siendo golpeado por la paralización de la obra pública, ordenada por el Gobierno de Javier Milei. Este descenso no sólo refleja la disminución del consumo interno, sino que también representa una señal de alerta sobre el futuro del mercado de la construcción.
En el gráfico de abajo se puede observar cómo el consumo de cemento cayó a un nivel histórico, con cifras comparables con la pandemia.
Además, el Índice Construya que mide la actividad de empresas líderes en el sector y la venta de materiales para la construcción también se redujo un 20,1% interanual y mostró su décima baja consecutiva. Aunque el índice había mostrado signos de estabilización a partir de abril, con cuatro meses de leves aumentos, agosto expuso un retroceso del 4,3% y se interrumpió esa recuperación. A pesar de los intentos por revitalizar el sector, la situación sigue siendo crítica.
Por otro lado, en el contexto de esta contracción, las exportaciones de cemento se convirtieron en la única variable con cifras positivas, aunque todavía bajas y marginales. Los índices sugieren una fuerte baja del mercado interno, donde la demanda continúa cayendo a niveles que solo pueden compararse con el impacto de la pandemia. En este sentido, el consumo acumulado de cemento en los primeros ocho meses de 2024 se encuentra un 28,2% por debajo del año récord de 2022.
La caída en la producción de cemento también es fuerte, con un descenso del 23,5% en agosto, la segunda más pronunciada en la última década. Esto plantea interrogantes sobre el futuro inmediato del sector que ya había experimentado un ciclo de contracción meses atrás. De acuerdo a Economía y Regiones, con la actividad proyectada para estancarse hasta fin de año, las estimaciones muestran que el sector podría enfrentar su segundo año consecutivo de retracción, algo que no se veía desde hace más de dos décadas.
El sector de la construcción en Argentina, en crisis
El escenario se agrava aún más considerando el contexto económico general tras el cambio de Gobierno a la gestión libertaria y la paralización de la obra pública. La consultora sostiene que, a nivel país, los nuevos tiempos están caracterizados por la incertidumbre y la falta de inversión.
Si bien se observaron intentos de recuperación en otras áreas, la construcción parece seguir en una senda negativa, con proyecciones que indican que podría cerrar el año con niveles de actividad en sus mínimos históricos.
La construcción en Argentina atraviesa una crisis profunda y prolongada. Las caídas consecutivas en consumo y producción siguen mostrando un estancamiento que dificulta la recuperación. Sin políticas nacionales decisivas para estimular el sector, la construcción podría seguir siendo un termómetro del malestar económico en el país.
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