El miércoles 31 de enero comenzó el tratamiento de la ley ómnibus en la Cámara de Diputados del Congreso. Lejos de ser una sesión corta y armoniosa, el caos reinó dentro y fuera del recinto. Destacó la presencia de Leonardo Sosa, quien tiene relación con el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner.
La Vicepresidenta primera de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, fue la primera en denunciar algo extraño que estaba sucediendo:
“Quiero hacer un aviso y una denuncia pública, de que se encuentra en la casa Leonardo Sosa, uno de los fundadores de Revolución Federal que fue parte del intento de asesinato a Cristina Kirchner. Está en esta casa retuiteando y amenazando diputados. Entró con una pulsera color roja, que se está distribuyendo desde algún lugar de esta cámara”

Revolución Federal, los Copitos y Cristina
El jueves 1 de septiembre de 2022, en el barrio de Recoleta, Buenos Aires el neonazi Fernando Sabag Montiel intentó dispararle a la entonces vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner. Gatilló dos veces y no salió ningún tiro.
Fue el famoso caso de “Los Copitos”, donde se determinó que el intento de magnicidio no vino de una sola persona, sino de un grupo organizado ligado a Gerardo Milman, Diputado del PRO.
La ex-pareja de Montiel, Brenda Uliarte dijo que era imposible que Fernando hubiera actuado solo y apuntó contra Revolución Federal, una organización conocida por sus acciones violentas y amenazas.
El 28 de agosto del 2022, mientras en la calle se realizaban manifestaciones de apoyo a Cristina, Leonardo Sosa y Gastón Guerra ingresan al departamento de la vecina que vive en el piso de arriba de Cristina Fernández de Kirchner.
Ese mismo día, a pocos días del atentado a la vicepresidenta, coinciden en las inmediaciones del atentado: Fernando Sabag y Leo Sosa.
El 20 de octubre del 2022 son detenidos Jonathan Morel, Leonardo Sosa y Gastón Guerra, todos integrantes de la agrupación de derecha Revolución Federal.
Sosa estuvo detenido por 13 días y fue procesado, junto a otros 3 integrantes de Revolución Federal dado que el juez consideró que los militantes de ultraderecha conformaron una agrupación que buscaba “imponer sus ideas o combatir las ajenas por la fuerza o el temor”.
A Morel y a Sosa los considera organizadores de la agrupación.

Carpintería por Youtube y los Caputo
Un nexo interesante de Revolución Federal, además de la conexión con Millman, es su relación con la empresa Caputo Hermanos, de la familia del flamante ministro de Economía Luis “Toto” Caputo.
Morel, el compañero de Sosa, puso una carpintería en Boulogne, zona norte de Buenos Aires, luego de haber aprendido el oficio con videos de Youtube.
Rossana Pía Caputo entró al local y compró unas mesitas que se rompieron, aun así la mujer le encargó más. Caputo Hermanos se dedica a la infraestructura de los barrios, no al diseño de interiores.
Entre la empresa y él se encontraron facturas y transferencias por más de 8 millones de pesos.
El 31 de agosto se produce el último pago de Caputo Hermanos. El día posterior fue el disparo que no salió.
Sosa, “leo_bertario”, en Diputados
Leonardo Sosa sigue procesado por incitación a la violencia, tema que hace que su presencia en el congreso sea aún más dañina. Lo único que hizo allí fue sacar fotos prohibidas, hacer comentarios degradantes y dudoso contenido para redes sociales.
No usa su nombre en redes, sino un juego de palabras con su nombre y su nuevo partido, su perfil es: «leo_bertario» por libertario y su emoji de un león.
No tardó en grabar un video desde lo alto del recinto cosificando a Marcela Pagano, haciendo zoom en su escote. «Apareció Marcela Pagano. Viva la libertad, carajo?».
Luego hostigó a Máximo Kirchner. «El mamarracho que faltaba», escribió mientras lo grababa en su lugar.
Irónicamente, también desmintió una noticia que estaba circulando en medios nacionales sobre qué Máximo no había dado el presente.
También se agarró con Nicolás Del Caño. «Del caño desvariando en vivo. Qué payaso impresentable», escribió y minutos más tarde agregó: «Echaron a Del Caño del recinto».
Durante su corta estadía no hizo mucho más que insultar y twittear. Finalizó su jornada rebatiendo contra Leandro Santoro, a quien también grabó sin su consentimiento. «Habla el parásito Santoro», posteó.
¿Quién lo invitó?
No contento con su engagement de redes, Sosa declaró en televisión que había sido invitado por «un grupo de libertarios» para, por alguna razón, «ir a hacer el aguante al Gobierno».
Luego, lo confirmó en un nuevo twit:
«A pesar de haberme comunicado amablemente con la COBARDE INESTABLE de Lilia Lemoine para aclarar el conflicto de ayer, ella eligió ir por las malas. Ya habiéndose difundido la lista de invitados, CONFIRMO que yo estaba en lista que ella AUTORIZABA a X cantidad de militantes a ingresar«.
Luego, se pelearon y dejaron de seguir en redes, que parece ser el lugar de confort, la oficina y el universo de Leonardo Sosa.
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