De la mano del chamamé, el verano correntino es sinónimo también de carnavales y las principales comparsas ya se encuentran en los días definitivos de lo que será la edición 2022. Aún en medio de la incertidumbre de la pandemia, la provincia confirmó que el show que reúne a espectadores de todo el país y otros lugares del mundo se realizará de igual manera.
En lo que respecta a las comparsas, como es habitual presentar una temática para el desfile y el show, todas volverán a utilizar el tema con que desfilaron en el 2020, antes de la irrupción del COVID-19. Por esto, según dejaron saber, no habrá competencia oficial en el corsódromo.
Lo cierto es que, aunque la mayoría de la organización interna de las agrupaciones musicales y comparsas ya parece estar saldada y los ensayos se encuentren en curso, no todas llegaron a un acuerdo con la empresa Ake Music, que organizará por segunda vez el evento.
Sólo Sapucay, la comparsa ganadora de los últimos años, habría llegado a un acuerdo. Las demás, por cuestiones económicas y de organización que no están incluidas en el contrato que deben firmar, aún no se incorporaron al mismo. Sin embargo, se espera que, una vez modificadas algunas cláusulas, puedan llegar a un trato esta semana, de modo que tengan tiempo de organizarse para el desfile que iniciará el 11 de febrero.
“Los contratos se deberían presentar con mayor tiempo de antelación, esto nos dificulta el armado de la comparsa, principalmente los carros y no nos queda tiempo para el armado”, señaló un referente de comparsa. Otra voz proveniente de una agrupación musical sostuvo: “Nuevamente no se están manejando con responsabilidad estas cuestiones, no hay comunicación con la organización”.
La voz de las protagonistas
NEA HOY dialogó con las presidentes de las principales comparsas de los carnavales oficiales de Corrientes, Guillermina Velazo, de Sapucay, y Andrea Iriondo, de Ará Berá. Ellas contaron cómo se organizan sus grupos de comparseros, las expectativas que tienen para el show y con respecto a la organización.
Por su parte, Guillermina Velazo manifestó que trabajan para realizar algunos cambios en la presentación que brindaron en 2020, con la temática “Sapucay del Iberá”, debido a que se modificó el plantel de comparseros y porque esperan sorprender al público.
Hace pocas semanas, la comparsa anunció el cambio de la bastonera de la escuela de samba y el de su gran bastonera. Así también, anunció el armado de una nueva marcha para el desfile en el corsódromo.
En estos días, las personas encargadas del vestuario, contó Velazo, se dedican a poner en condiciones todo lo que se estropeó desde el último desfile; zapatos, plumas, piedras, carros y demás recursos.
Respecto a los ensayos, la comparsa dará inicio desde esta noche a los encuentros generales en el Club Juventus de la capital, en que se verá todo el potencial artístico con que cuenta Sapucay. Es importante destacar que la escuela de samba lleva algunos meses de ensayo de manera individual.
El desafío de adaptarse a la pandemia
Por otro lado, Andrea Iriondo, referente de Ará Berá resaltó que las expectativas de su comparsa es brindar un buen show y transmitir alegría a la ciudadanía, luego del año difícil que se vivió a causa de la pandemia.
La dirigente hizo especial atención a la pandemia y señaló que los ensayos y actividades de la comparsa se realizarán teniendo en cuenta todos los protocolos sanitarios ya que la compleja situación sanitaria no finalizó.
También dijo que adaptaron y mejoraron el tema que presentarán, denominado “Universo Ará Berá”, ya que hay algunas figuras que no entrarán y otras que cambiarán de lugar en el show de la comparsa.
En los ensayos de cara a los carnavales, implementan el uso de barbijo, distanciamiento y disponen, en el caso de la escuela de samba, que los instrumentos sólo sean manipulados por sus dueños. La comparsa también iniciará hoy los ensayos intensivos que reunirán al cuerpo de baile y su batería.
Fomentar el ambiente familiar
En el marco de las expectativas que comunicaron a NEA HOY las principales referentes del carnaval correntino se encontró la idea de poder reestablecer en el corsódromo el ambiente familiar, como fue característico desde los inicios del evento.
Esto significa que se disponga de mayores espacios donde la familia pueda compartir un momento ameno, particularmente, detrás de las tribunas desde donde se ve el show, en dónde los últimos años no se ha permitido permanecer al público, ni se han dispuesto los lugares de ventas de comida donde la gente pueda reunirse.
La presidente de Sapucay sostuvo que las comparsas deben exigir a la organización que se mantengan las costumbres familiares y esto genere un clima más atractivo para los participantes durante los carnavales.
Además, ambas referentes del carnaval hicieron una crítica a la demora en la contratación de la empresa organizadora.
“Siempre se espera hasta último momento para realizar el contrato y la verdad que mover una comparsa o una agrupación musical lleva su tiempo. Uno no puede montar un buen espectáculo en 60 días, por lo menos al nivel que nos exigen y nos exigimos”, dijo la presidente de Ará Berá.
Por último, Iriondo destacó que los carnavales correntinos tienen trascendencia a nivel nacional y por ello deberían recibir mayor atención por parte de los organizadores, para que sea una oferta mucho más atractiva dentro del ámbito turístico de la provincia.
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