El debate por la baja de la imputabilidad para atrapar a adolescentes que cometen delitos es un debate siempre latente en la sociedad. Hay quienes afirman que una ley con ese espíritu resolvería “el problema de la delincuencia”. Quienes luchan por los derechos de la niñez y la adolescencia afirman que no, y que incluso empeoraría las cosas.
En la provincia del Chaco, existe un espacio convivencial llamado Aldea Tres Horquetas que aloja a adolescentes de 16 a 18 años en conflicto con la ley penal. Hasta hace tiempo atrás era un lugar regenteado por el Servicio Penitenciario Provincial, luego pasó a la órbita del Ministerio de Desarrollo Social ya que los jóvenes no necesitan estar en una cárcel, sino en un espacio que los contenga y garantice sus derechos.
En diálogo con NEA HOY, Marianela Motter Lugo, Asesora de Menores N°3 de Resistencia se refirió a las leyes provinciales en materia de jóvenes en conflicto con la ley penal y cómo abordan las problemática de delitos perpetrados por adolescentes menores de 18 años.
¿Cómo funciona la ley para adolescentes que cometen delitos?
Según explica Marianela Motter, existe un Régimen Penal Juvenil establecido por la Ley Nacional 22.278 de la década de los 80 que se mantuvo con algunas modificaciones. A su vez, a nivel provincial existe un código procesal penal aplicable a los adolescentes, la Ley Provincial 2.951-N. “Estas normas han estructurado un sistema diferenciado, en cierta medida con respecto al proceso penal por el que atraviesan los adultos”, advierte.
Se ha establecido que la edad de imputabilidad es desde los 16 años, antes de esa edad, la persona no puede ser sujeto a un proceso penal. No obstante la ley 22.278 dice que el Juez podrá disponer que el joven menor de edad pueda quedarse con su familia o alojarlo en instituciones.
“Desde los 16 años, se los considera imputables, la Ley 22.278 dice que es punible, es decir que se le puede aplicar una pena en delitos graves que tengan penas superiores a los dos años”.
La especialista explica que en el caso de que el delito sea cometido por un menor de edad, el Régimen Penal Juvenil indica que una vez que se comete el delito, la Policía comunica a la Fiscalía de turno y también al Juez de Niños, Niñas, Adolescencia y Familia en turno. Comienza la investigación penal y paralelamente el Juzgado de NNAyF solicita informes a equipos interdisciplinarios y evalúa el contexto socio-afectivo del adolescente para tomar medidas.
“Se decide entonces qué medida se toma con el joven hasta tanto se resuelva la investigación penal. Lo importante del Régimen Penal Juvenil es que establece que el adolescente debe ser imputado si se comprueba que cometió el delito. Una vez que ocurre esto, en base a los informes de los equipos del Juzgado, se evalúa la medida que se aplica”, destacó Marianela Motter.
¿Dónde se alojan a los adolescentes?
El abordaje de estos casos se modificó a partir de la aprobación de la Ley Provincial 2.086-C, de protección de NNA. “Eso quiere decir que adolescentes menores de 18 años que hayan cometido un delito grave quedan bajo el resguardo del sistema de protección integral a cargo de la Subsecretaría de NNAyF de la provincia. No ingresa al sistema penal”.
Paralelamente, avanza el proceso penal. Si el fiscal de la causa entiende que hay elementos para acusar al adolescente de haber cometido el delito, se eleva a juicio. “El juicio se realiza en el ámbito del Juzgado de NNAyF. En esos casos, el Juez evalúa la necesidad de aplicarle o no una pena una vez que cumpla los 18 años”.
“EL ALOJAMIENTO NO DEJA DE SER UNA PRIVACIÓN DE LA LIBERTAD, PERO SE ABORDA DE OTRA MANERA”. MARIANELA MOTTER, ASESORA DE MENORES.
Para la Asesora de Menores de Resistencia, el Régimen Penal Juvenil es claro y establece que solo deben ser alojados en la Aldea Tres Horquetas aquellos que puedan obstaculizar la investigación o evadirla. Sin embargo, en ocasiones, ese alojamiento se da como una medida para proteger al adolescente que cometió el delito de su entorno.
Asimismo, el término que se establece para esa medida excepcional de alojamiento en la Aldea Tres Horquetas es solo de 3 meses debido a que la Ley 2.951-N que rige desde 2019 estableció ese tiempo. En ese período, los equipos de la Aldea trabajan de forma integral (con la familia) del joven y el apoyo de la Secretaría de NNAyF del Chaco para fortalecer a la familia del joven.
“Siempre se busca que los jóvenes concluyan sus estudios, se interesen por un oficio o profesión, reciban la asistencia necesaria en el caso que padezcan consumos problemáticos de sustancias”, detalla Marianela Motter.
Una vez transcurrido los 3 meses o antes incluso cuando se puede vislumbrar un compromiso del entorno familiar con el adolescente, se transforma esa internación en una libertad vigilada. Una medida que se sostiene hasta los 18 años siempre y cuando el jóven no cometa otros delitos.
“La libertad vigilada es el compromiso de los tutores de que el adolescente cumpla con ciertas pautas: continuar la escuela, tratamiento terapéutico, etc y otras acciones para no volver a cometer delitos. Transcurrido los 18 años cesa la medida proteccional”, indica Marianela Motter.
Derechos que deben garantizarse
Con la suscripción a la Convención sobre los Derechos del Niño, y la opinión consultiva a la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre el estatus jurídico del niño, han considerado que se deben aplicar otras convenciones de derechos a los jóvenes en conflicto con la ley penal. Lo cual ha sido muy importante porque modificó ciertas prácticas.
La ley provincial actual que regula el Régimen Penal Juvenil tomó todos esos lineamientos. Como por ejemplo: el adolescente que comete un delito debe contar con un abogado durante todo el proceso judicial e incluso durante las medidas de protección. También con un asesor o asesora que tiene la función de velar por los derechos y garantías del joven, que es el rol que cumple Marianela.
Estadísticas
Este año, en su asesoría, Marianela solo tuvo a tres adolescentes que cometieron un delito y fueron alojados en la Aldea. En total son entre siete y ocho los alojados que provienen de otras localidades.
La asesora, especialista en niñez y adolescencia, señaló que en el país, hasta agosto del 2020 había 5.104 jóvenes en conflicto con la ley, de los cuales 137 (2,7%) se encuentran en Chaco cumpliendo distintas medidas proteccionales.
En el Relevamiento de Unicef sobre adolescentes en conflicto con la Ley Penal se aprecia que los delitos contra la propiedad cometidos por adolescentes representan el 56,7% del total de presuntos delitos a nivel nacional, con 2.892 adolescentes. Dentro de esta categoría, el robo ocupa el primer lugar representando el 63,3% (1.832) del total de delitos contra la propiedad.
La aldea Tres Horquetas
Actualmente, conviven más de cinco adolescentes aunque la aldea posee una capacidad para alojar a 20 jóvenes (varones y mujeres). En el lugar, además, trabajan 30 operadores entre psicólogos, asistentes sociales, docentes y acompañantes. Tres Horquetas cuenta con educación primaria, secundaria, diferentes talleres de recreación y capacitación en oficios.
Se trata así de un espacio que debe garantizar el acceso a derechos establecidos por la Convención sobre los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, a la cual Argentina está adherida. Razón por la cual, los adolescentes allí alojados deben acceder a un trato digno, educación, ocupación provechosa del tiempo y la obtención de saberes para una correcta reincorporación a la sociedad.
Cumplimentando los derechos decretados por organismos internacionales, el Gobierno de la Provincia del Chaco a través de los ministerios de Desarrollo Social, de Seguridad, de Gobierno y de Salud, trabaja intensamente para garantizar el buen desarrollo de esta población vulnerable.
La Aldea Tres Horquetas posee un fuerte acompañamiento psicológico para los internos, apuntando a la autovaloración y fortaleciendo el vínculo familiar. Los acompañantes son profesionales altamente capacitados para poder atender necesidades tan especiales. Psicólogos, Trabajadores Sociales, Operadores en Psicología Social, personal de la Dirección de Salud Mental son parte del plantel permanente de la institución.
En cuanto al aspecto sanitario los jóvenes, cuentan con un grupo de enfermeros y visitas controladas al centro de Salud de Colonia Benítez dependiendo de la situación que se deba atender. Uno de los factores más importantes para la estadía y posterior egreso de los chicos es la vinculación familiar.
El Ministerio de Desarrollo Social trabaja junto a los Juzgados del Menor para poder restablecer la buena relación con sus familiares directos, quienes deberán bregar por su futuro una vez que los chicos recuperen la libertad. Actualmente hay dos jóvenes en Villa Ángela con “libertad afectiva vigilada”, proceso de vinculación familiar asistida por los profesionales de Tres Horquetas previo a la recuperación total de la libertad.
ADEMÁS EN NEA HOY:
Cierre de las elecciones con sorpresas en el Chaco: estos son los resultados
