Según un estudio
del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), las mujeres latinoamericanas solo ocupan el 15 por ciento de los cargos directivos en empresas de la región y apenas el 14 por ciento son dueñas de las mismas, lo que sigue confirmando la brecha de género que existe en el mercado laboral.
La muestra final quedó conformada por 1.015 empresas de 20 países de la región que fueron consideradas de acuerdo al peso real de cada estrato en el universo (cantidad de empresas exportadoras y no exportadoras de la región).
El trabajo de campo fue realizado entre mayo y agosto de 2020, con un método de recolección de datos online con seguimiento y refuerzo telefónico sobre cada empresa.
Además, el estudio del BID presentó un análisis cualitativo que complementa el cuantitativo previamente detallado. El objetivo fue compilar las percepciones y experiencias de mujeres trabajadoras sobre la equidad de género intrafirma en la región que refuercen o no lo relevado con la encuesta.
Resultados
El Banco Interamericano de Desarrollo verificó que la presencia femenina predomina fuertemente en las áreas consideradas “blandas”, es decir, las que no requieren habilidades en Ciencia, Tecnología, ingeniería y Matemática.
De las mujeres empleadas, el 64% se distribuye en el área de Recursos Humanos, el 63% en Comunicaciones y Relaciones Públicas y el 53% en Responsabilidad Social. Por el contrario, en las áreas consideradas “duras” como Comercio Exterior, Operaciones e Informática las mujeres representan menos del 35% del total de los empleados.
En cuanto a puestos jerárquicos, la tendencia es similar: en las primeras, las mujeres ocupan más del 65% del total de las direcciones y gerencias, llegando al 75% en Comunicaciones y Relaciones Públicas, 70% en Recursos Humanos y 65% en Responsabilidad Social, mientras que el porcentaje se reduce en el resto de las áreas y alcanza sus mínimos en Operaciones, Informática y Comercialización y Ventas.
Diferenciando los resultados según las características de la empresa, los resultados de la encuesta revelaron que tanto las empresas de servicios como las lideradas por mujeres son las que mayor porcentaje de mujeres en tecnologías mantienen.En promedio, el sector de servicios muestra un 37% de mujeres en el total de mano de obra de este tipo, seguido por comercio (35%) y manufactura (30%).Las empresas gerenciadas por mujeres reportaron un 44% en promedio (contra el 33% de las gerenciadas por hombres) y las que tienen por lo menos una propietaria mujer un 38% (contra el 32% entre las que no tenían propietarias mujeres).
Las empresas capacitan menos a las mujeres
Según el estudio del Banco Interamericano de Desarrollo, las mujeres siguen siendo segregadas aún dentro del mercado laboral. El estudio observa que la representación femenina entre la fuerza laboral que recibe capacitaciones es muy baja. Solo 4 de cada 10 personas empleadas son capacitadas por parte de la empresa (45%), y de esos 4, apenas uno es mujer (33%).Si bien se observa que las empresas de servicios tienen una tendencia a capacitar una mayor proporción de empleados (48% vs. 46% en comercio y 42% en manufacturas), el porcentaje de mujeres capacitadas se mantiene similar al comparar por tamaño, rubro y exportaciones. Sin embargo, existe una clara tendencia a capacitar más mujeres en las empresas lideradas por ellas y en las de origen accionario extranjero.
La existencia de mujeres en posiciones altas de decisión potencia a las mujeres en la empresa a crecer profesionalmente y acceder a mejores posiciones. También se comprobó que las capacitaciones a la fuerza laboral, el trabajo con tecnologías avanzadas y la cultura empresarial favorece también a la mujer como trabajadora.
Contrario al mito de la rivalidad femenina, el estudio demuestra que las mujeres en puestos de liderazgo pueden estar más comprometidas con la causa que los hombres, al haber estado expuestas a estas desigualdades durante su extensa carrera profesional. Desde sus posiciones, es probable que utilicen su influencia para promover políticas más equitativas para las mujeres y ejerzan de mentoras para crear más oportunidades para ellas.
Las causas de la brecha de género
“La desigualdad de género, particularmente en el mercado laboral, ha obstaculizado el crecimiento económico y el desarrollo social en la región durante demasiado tiempo. Es por eso que invertir en el liderazgo femenino y promover empresas propiedad de mujeres es fundamental para impulsar un crecimiento sólido y sostenible en toda América Latina y el Caribe“, ha subrayado el presidente del BID, Mauricio Claver-Carone.Existen variedad de factores que explican la inequidad de género. Los estereotipos relegan a las mujeres a realizar la mayor parte del trabajo de cuidado no remunerado en el hogar y dificultan su acceso a nuevas oportunidades de trabajo.Además, la brecha de género existente en el mercado laboral las desplaza a empleos de baja calidad los cuales limitan su crecimiento profesional. Los anteriores factores se evidencian en la gran cantidad de mujeres trabajadoras en los sectores informales de la economía, aunque también se encuentran en los sectores formales.
“La desigualdad de género, particularmente en el mercado laboral, ha obstaculizado el crecimiento económico y el desarrollo social en la región durante demasiado tiempo.” Mauricio Claver-Carone, presidente del BID
Sumado a esto, las mujeres enfrentan sesgos regulatorios, culturales y un acceso limitado al capital e información que impiden su desarrollo como emprendedoras. Estas condiciones las sitúan en una situación de desventaja para aprovechar los beneficios que el comercio trae aparejados. ADEMÁS EN NEA HOY:Nancy Sotelo: “Desde el INADI planteamos abordar las situaciones de discriminación dentro de los clubes”Ni Una Menos: Paraguay declaró la Emergencia Nacional por FemincidiosMujeres y política: ¿se cumple la paridad de género en las listas de Chaco?