Paraguay, como otros países de Latinoamérica, atraviesa la pandemia del COVID-19 con graves problemas sociales, económicos y sanitarios. El Presidente Mario Abdo Benítez presentó el 1 de julio su tercer informe anual y el segundo en pandemia; el mismo muestra que su gestión tuvo foco en la vacunación y la recuperación económica.
La cuarentena, para prevenir el aumento de casos y evitar un colapso en la salud del país, fue uno de los motivos de crisis para los ciudadanos paraguayos. Las restricciones para los trabajadores informales que no cuentan con trabajos en relación de dependencia provocó malestar en Paraguay.
La salud y la economía han marcado la política del Gobierno en el último año, obligado a acondicionar a contrarreloj un sistema sanitario precario y a impulsar las ayudas y los estímulos económicos para mitigar el golpe de la pandemia, que hasta la fecha ha dejado cerca de 13.000 fallecidos en el país.

Gestión de la pandemia del COVID-19 en Paraguay
El 15 de agosto del 2018, Abdo Benítez asumió como Presidente de Paraguay. «Se cumple la mitad de mi periodo presidencial en uno de los momentos más dramáticos que le toca atravesar al Paraguay, en medio de una crisis sanitaria, social y económica mundial sin precedentes», manifestó el Presidente.
Asimismo, Abdo Benítez se refirió a los objetivos durante su gestión, en medio de la crisis sanitaria y social producto del COVID-19.
«Priorizar la vida y la salud de los paraguayos sin destruir la economía», expresó Abdo Benítez.
Sin embargo, en el mes de marzo, centenares de paraguayos salieron a manifestarse en las calles de Asunción, en reclamo a la gestión de la pandemia, uno de los motivos de los presentes era exigir la renuncia del Presidente y expresar su descontento por la escasez de medicamentos y de insumos en los saturados hospitales públicos.

Asimismo, el informe anual de la gestión del Presidente expuso que uno de los mayores legados de su Gobierno es el fortalecimiento del sistema de salud, esto se ve reflejado con el aporte de 92 millones de dólares para la compra de medicamentos y equipos por parte de las dos binacionales, Itaipú y Yacyretá.
Crecimiento de la economía
El mundo entero se vio paralizado por las restricciones para evitar contagios y bajar la tasa de muertes por COVID-19. El sistema económico de Paraguay no estuvo exento de ser afectado. La economía, desde la alerta sanitaria, cayó un 0,6% en 2020.
No obstante, el Presidente sostuvo que el país está en el camino hacia la recuperación económica, con un repunte estimado del 3,5 % para 2021, según el Banco Central del Paraguay.
Para conseguirlo, el Ejecutivo confía en el plan de reactivación basado en la contención social, la inversión en obras y viviendas sociales para la generación de empleo y el financiamiento para el sector productivo.

Descontento social por la gestión de Mario Abdo Benítez
El informe anual del Presidente de Paraguay recibió críticas por parte de los ciudadanos como así también por representantes de la Cámara de Senadores. Por su parte, el Senador del Partido Liberal Radical Auténtico, Ramón Eusebio Ayala, expresó que el discurso del mandatario omitió la crisis económica y sanitaria, además no ofreció soluciones a estos y otros problemas.
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