La carrera por la Gobernación de Corrientes se lanzó hace tiempo y los referentes libertarios no se demoraron en identificar las deficiencias de la actual gestión para intentar capitalizar el enojo del electorado. Desde hace tiempo, algunos líderes del partido de Javier Milei intentan apropiarse del reclamo contra la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (DPEC), por los aumentos, los cortes de luz y la baja calidad del servicio. Sin embargo, el discurso, con tono electoral, carece de un factor importante: la responsabilidad que tiene el Gobierno libertario en el incremento de la tarifa de luz.
Hace algunos días, NEA HOY se hizo eco de un reclamo que se realizó contra la empresa estatal que tuvo lugar en la localidad correntina de Santa Rosa. La movilización de vecinos tuvo entre sus promotores a un medio local llamado «TcnRadio Santa Rosa» que, constantemente, realiza promoción partidaria en favor de Javier Milei y que, al igual que algunas cuentas de redes sociales aliadas al partido, intenta atribuir la totalidad de la responsabilidad por los aumentos al Gobierno de Valdés.
A su vez, este reclamo comenzó a ser utilizado hace tiempo por uno de los referentes libertarios que se lanzó como candidato a Gobernador. Se trata de Ezequiel «Teke Romero», un joven abogado, que, comúnmente, critica a la empresa estatal e intenta instalar la idea de que los excesivos aumentos en las boletas de luz son responsabilidad exclusiva de la DPEC.

Nada más lejos de la realidad. Aunque la empresa estatal, actualmente intervenida por el Gobierno provincial que encabeza Gustavo Valdés, tiene importantes falencias desde hace años y, actualmente, sus costos operativos superan al costo de compra de la energía (52,7%, sobre el 47% que se destina a la proveedora CAMMESA), gran parte de los excesivos incrementos en las boletas de luz se explican por las decisiones que tomó el Gobierno nacional desde su llegada al poder en diciembre de 2023.
Vale señalar, tal como indicó NEA HOY hace algunos días, que la quita de subsidios energéticos implementada por el Gobierno de Javier Milei está generando que usuarios de ingresos bajos y medios deban pagar tarifas como si fueran de altos ingresos, situación que se agravará en el verano. Esto ocurre debido a que, al superar un límite de consumo subsidiado, estas categorías deben abonar una tarifa plena, que representa aproximadamente más del 80% de la factura, por ser considerado usuarios N1 (altos ingresos). En este contexto, en lo que va del 2024 las facturas ya aumentaron 350% bajo el nuevo esquema de subsidios energéticos.
La Resolución 92/2024, emitida en junio por la Secretaría de Energía de la Nación, establece un límite de consumo subsidiado de 350 kWh para usuarios de bajos ingresos (categoría N2) que antes no tenían, mientras que para los de ingresos medios (N3) el tope se redujo de 400 Kwh a 250 Kwh. A pesar de calificar para el subsidio nacional, el bajo umbral provoca que cualquier consumo que exceda estos límites sea facturado a tarifa plena, incrementando considerablemente los costos.

Al igual que la DPEC, otras empresas energéticas del país han indicado los factores que producen los excesivos aumentos en las boletas de luz. La EPEC (distribuidora del servicio eléctrico en Córdoba) indicó que entre las causas del incremento de su tarifa se encuentran la quita de subsidios y la estacionalidad: «La energía tiene consumo estacional con picos en verano y en invierno», indicaron a los usuarios. Asimismo, la empresa cordobesa indicó que, junto con los aumentos de la energía eléctrica, las recategorizaciones establecidas por el Gobierno de Milei explicaron gran parte del incremento en las boletas.
“En los últimos padrones que hemos recibido aquellos que antes tenían categoría N3, desde la Nación hay muchos usuarios que los han recategorizado y los han pasado a N1. Suponemos que tiene que ver con un cruce de datos entre la Nación y los registros que tiene a nivel nacional el Gobierno para determinar en qué categoría queda cada usuario», consideraron desde la empresa de Córdoba.
En la misma línea, empresas como Edenor y Edesur, dejaron saber que cada vez son más los usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires que, al igual que otros usuarios de todo el país, no logran cubrir el costo de la tarifa de luz. Mientras tanto, sus directivos reafirman que en el verano podrían darse cortes del servicio debido a la falta de inversión del Gobierno libertario en proyectos que iban a aumentar la capacidad energética del país.

Sucede que en el primer año de motosierra de Milei que incluyó la paralización de la obra pública nacional, la Secretaría de Energía canceló los contratos para ampliar centrales de energía termoeléctrica iniciadas durante el gobierno anterior y eso implica resignar un incremento de 3.340 megavatios (MW) de potencia, un 7% más de lo que se produce en la actualidad. En las empresas advierten que los picos de consumo que pueden llegar a haber en pleno verano no podrán ser cubiertos por la generación actual de electricidad y se deberá exportar energía de otros países, lo que significarán costos más altos.
En este contexto, los referentes libertarios de Corrientes intentan convertirse en abanderados de los reclamos contra la DPEC para, de algún modo, capitalizar el enojo del electorado y conseguir su apoyo el año próximo. La receta es la misma que utilizó Javier Milei; claro está que la mayoría de sus reclamos contra el sistema político nacional terminaron disolviendose en el aire. En el caso de Corrientes, resta ver qué tan rentable puede ser la crítica al servicio energético local y si el electorado comprará el relato que excluye a uno de los principales protagonistas del problema.
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