La inflación en Argentina continúa impactando severamente el poder adquisitivo de los trabajadores, quienes ven cómo los aumentos salariales quedan muy por detrás de los incrementos en los precios de alimentos y servicios básicos. Datos difundidos en el noticiero de C5N en el programa De Una señalan que los salarios aumentaron un 160% desde diciembre del 2023 a octubre del 2024 mientras que los productos de la canasta básica y los servicios esenciales muestran subas mucho mayores en ese periodo, según el INDEC.
La fuerte caída del salario real también tiene detrás los ajustes de tarifas que redujeron la porción de los ingresos familiares disponible para las compras de bienes de la canasta básica. Muestra de ello es que las ventas en supermercados cayeron 10,1% interanual en agosto y 11,5% en el acumulado ene/ago 2024.
Aumento en los alimentos básicos
La suba de precios en alimentos ha sido especialmente notoria. De acuerdo con los datos de diciembre a octubre analizados por el mencionado medio que analiza números de CABA, la cebolla lidera el incremento con un alarmante 358%, seguida por productos como el queso cremoso, que aumentó un 206%, y la lechuga, que subió un 279%.
Otros alimentos esenciales también registraron alzas considerables: el café subió un 214%, el aceite un 138%, y el tomate un 159%. Estas cifras muestran que los aumentos en productos básicos de la canasta alimentaria superan ampliamente el incremento salarial, afectando directamente a los sectores más vulnerables de la población y a su poder adquisitivo.
El golpe de los servicios básicos al bolsillo de los argentinos
Además de los alimentos, los servicios públicos y el transporte también han tenido incrementos drásticos en 11 meses de gestión libertaria (diciembre a octubre). Según el informe, la tarifa de la electricidad (cuyo aumento fue autorizado por el Gobierno nacional recientemente) y el agua tuvieron incrementos del 520% y 289% respectivamente. Estos aumentos, mucho mayores que el crecimiento salarial, dejan en evidencia la fuerte pérdida de poder adquisitivo frente a las tarifas de servicios.
Un ajuste insuficiente en los salarios
Aunque los salarios del sector privado registrado subieron un 160%, esta suba resulta insuficiente para acompañar el ritmo de la inflación. Los datos reflejan una brecha creciente entre los ingresos y el costo de vida, en un contexto donde la inflación interanual en Argentina sigue en niveles altísimos.
Esto ha obligado a muchas familias a ajustar sus consumos, restringiendo el gasto en alimentos y servicios que son esenciales para la calidad de vida.
La situación económica actual pone de manifiesto una profunda crisis de consumo y una fuerte pérdida de poder adquisitivo en los hogares argentinos. En este contexto, la economía argentina enfrenta uno de sus desafíos más críticos.
Fuente: C5N
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