El movimiento estudiantil y docente se movilizará hoy en una manifestación multitudinaria que engloba a todas las universidades públicas del país bajo el lema “En defensa de la educación pública” a favor de la educación superior y en contra del ajuste del Presidente Milei.
La marcha no es sólo por un tema económico sino también en rechazo al avance de políticas anticientíficas. Se busca hacer prioritarias, nuevamente, la inversión en ciencia, tecnología y educación como pilares fundamentales para el desarrollo del país.
A pesar de que el Gobierno anunció un acuerdo inexistente con las universidades, el CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) mantuvo la movilización. La medida fue respaldada por 73 universidades públicas de todo el país.
Desde la Reforma Universitaria de 1918, también conocida como el “Grito de Córdoba”, el movimiento estudiantil se ha movilizado por la democratización de la universidad y desde ese día no han parado. La lucha por la educación para todos ha sido el motor de varias de las mayores movilizaciones del país.
Menem, el 1995 y la Ley de Educación Federal
Con la asunción de Menem en 1989, comenzó la embestida para cobrar el arancel en las universidades. El entonces Ministro de Educación Antonio Salonia planteó la posibilidad de arancelar los estudios universitarios como una fuente de financiación de los servicios académicos. Desde su anuncio, la propuesta generó un fuerte rechazo de los sectores docentes y estudiantiles.
En 1992 se sanciona la Ley de Educación Federal (Donde se extendió la obligatoriedad de la educación a diez años y fue la de la famosa EGB). En 1993, Menem reavivó la idea del arancelamiento, que luego ingresó a Diputados.
En julio de 1995 se aprobó la Ley de Educación Superior que desligaba al Estado de su deber de garantizar la educación pública. Es entonces que el movimiento estudiantil respondió con tomas de facultades, proliferación de asambleas y manifestaciones. Estas luchas tuvieron un alcance nacional con tomas y movilizaciones en todo el país.
Diego haciendo jueguito en la UBA en defensa de la educación pública, 1995. pic.twitter.com/TOIXZVg01T
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Hubo dos intentos de hacer recortar el presupuesto de las universidades. El primer intento, como ya vimos, fue con el referente de Milei y entonces Ministro de Economía de Menem Roque Fernández en 1999. El segundo fue en el 2001.
De la Rúa, el 2001, el Movimiento Estudiantil y los arancelamientos
Durante la breve presidencia de la Alianza (1999-2001), la crisis presupuestaria se agravó así que implementaron sucesivos recortes en el Estado. También amenazaron con los famosos aranceles universitarios.
somos un país tan cíclico que duele. pic.twitter.com/jaYwWDo5fH
— unidad básica nos vemos el 23 (@yoonkookurl) April 18, 2024
En el 2001, el actual Diputado por Hacemos Coalición Federal y entonces Ministro de Economía Ricardo López Murphy despidió 40.000 empleados públicos, anuló becas y pensiones, anunció el pago de jubilaciones en 12 meses, recortó los programas sanitarios por 50 millones de pesos y redujo las indemnizaciones por despidos.
La gota que rebalsó el vaso y le costó el cargo fue el recorte realizado en educación, que incluía la cancelación de becas y programas, un achicamiento del 5% del gasto en el presupuesto y una reducción de las partidas asignadas a la Universidad de Buenos Aires.
Los rectores de todas las universidades repudiaron y criticaron el ajuste, los docentes de las universidades nacionales anunciaron que no tomarían exámenes y tampoco comenzarían las clases en el segundo cuatrimestre. La decisión fue tomada por la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu).
La huelga abarcó a los 120.000 docentes que enseñaban en las entonces 37 universidades públicas del país y afectaron al millón de alumnos que estudian en el sistema de educación superior. El entonces titular de la Federación Universitaria Argentina, Manuel Terrádez, confirmó a este diario: “Los estudiantes vamos a salir a la calle”. En apenas 15 días, López Murphy tuvo que renunciar.
Milei, el 2024 y el presupuesto para las universidades es el más bajo desde que se tiene registro
Lo que comenzó esta bola de nieve que fue rodando y agigantando su tamaño hasta llegar a la marcha nacional universitaria del día de hoy fue la decisión del Gobierno de prorrogar el presupuesto 2023.
Es decir que las universidades recibieron la misma cantidad de dinero que el año anterior sin tener en cuenta la inflación de los últimos meses (51,6% en los primeros tres meses completos del Gobierno de Javier Milei). Debido a esto, las casas de estudio podrán funcionar, con suerte, hasta mayo.
Frente a este escenario, desde la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) realizaron un análisis detallado del presupuesto universitario desde el año 1997 hasta el primer trimestre del 2024. Algunos datos relevantes:
- Sin una ampliación presupuestaria, este sería el nivel más bajo de financiación universitaria desde el año 1997.
- Para 2024, el presupuesto asignado al Programa Desarrollo de la Educación Superior (principal programa universitario) es un 72% más bajo en comparación con el año anterior.
- La ejecución presupuestaria del primer trimestre refleja una reducción del 34% frente al mismo período del año pasado.
- La caída interanual en la ejecución presupuestaria universitaria fue incluso más pronunciada que el promedio del gasto público nacional
Es por esto que una vez más, el movimiento estudiantil se hace presente en las calles, con marchas en todo el país a favor de todas las universidades públicas, ya que la Universidad pública, gratuita, inclusiva y de calidad es y será siempre un orgullo para todos los argentinos.
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