Si bien la política sanitaria aplicada en Formosa ante la pandemia por el COVID-19 es cuestionada por la oposición (a nivel nacional y local), la cantidad de contagios y muertes por coronavirus son incuestionables por lo que la provincia tiene los mejores indicadores del país.
La estrategia es muy clara para evitar el aumento de contagios, con resultados concretos y efectivos. Toda persona contagiada con COVID-19 positivo está dentro del sistema público de salud de Formosa. Ahora bien, ¿por qué en Formosa no se permite hacer la cuarentena domiciliaria?.
La provincia norteña viene luchando con uno de los problemas más significativos desde que comenzó la pandemia: el ingreso irregular de personas por pasos clandestinos; muchas de ellas resultaron ser positivas a COVID-19. Además, Formosa tiene un estrecho límite con localidades de las provincias de Chaco y Salta, sumado el paso fronterizo con Paraguay.
El aislamiento en domicilio de personas positivas o asintomáticas muchas veces indica que no se cumple. Tal es el caso de Corrientes, donde 600 personas violaron el aislamiento preventivo o en Chaco se iniciaron causas judiciales contra pacientes con COVID-19 que al momento de su aislamiento salieron a la calle e incumplieron las recomendaciones del Ministerio de Salud.
Es complejo que una persona asintomática con coronavirus que debe permanecer aislada tome conciencia de que puede contagiar a otros. Para evitar el rebrote de coronavirus en Formosa se dispuso la atención y la realización de hisopados; mientras que las personas detectadas o contactos estrechos son alojadas en dos tipos de centros de atención sanitaria. Está decisión permite al sistema de salud de Formosa llevar un control para evitar más contagios y asistir a las personas con algún antecedente previo o comorbilidad.
Pero, ante las versiones y denuncias presentadas por dirigentes de Juntos por el Cambio y del Gobierno de Mauricio Macri como Elisa Carrió, Mario Negri y el Senador por Formosa, Luis Naidenoff; el Partido Justicialista, el Bloque de Diputados de la provincia, gremialistas y varios políticos salieron a respaldar las políticas sanitarias.
El PJ salió a respaldar al Gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, asegurando que “se destaca especialmente por los indicadores sanitarios logrados en defensa de su población” ante la pandemia de coronavirus. “La política sanitaria desplegada por el Gobierno Provincial logró tener la menor cantidad de contagios y la menor cantidad de muertes por COVID-19 en la Argentina”, señala el comunicado del partido.
El documento titulado “La vida humana: valor fundamental y límite a la mentira”, firmado por el Presidente del Partido Justicialista, José Luis Gioja, denunció una “feroz campaña política y mediática” contra el Gobierno de Formosa. “Los insólitos pedidos de intervención federal y las permanentes operaciones motorizadas por sectores de la oposición al Gobierno Nacional dejan en evidencia la intencionalidad política de la permanente campaña de desprestigio contra Formosa”, señaló el partido.
El comunicado del PJ agrega que quienes denostan las medidas para proteger la vida y la salud frente a la pandemia “solo buscan, con estas artimañas, lograr los espacios que el voto popular de los formoseños les niega contundentemente”. En ese sentido, el PJ afirmó que “los agravios contra Gildo Insfrán no son casualidad: no sólo es un Gobernador que puede mostrar una gran gestión en su provincia, sino también es el Presidente del Congreso Nacional del PJ y un dirigente de amplia y destacada trayectoria como militante y referente de nuestro movimiento político”.
Frente al ataque a Formosa, mediante una solicitada el Vicegobernador y Presidente de la Legislatura Eber Solís, y el Bloque de Diputados del Partido Justicialista, repudiaron de manera firme y enérgica, la embestida política que se realiza contra la Provincia de Formosa, esta vez por parte de Elisa Carrió, quien señaló “irresponsable y falazmente que en Formosa existe una supuesta violación de los Derechos Humanos. Y con espíritu absolutamente antidemocrático solicita la intervención federal a la provincia”, expresa el comunicado.
La política de albergar en centros de alojamiento a los que ingresan y a los contactos estrechos, y a los infectados en centros de atención sanitaria o en el Hospital de la Contingencia COVID-19, es uno de los grandes aciertos que hemos tendido en la lucha contra el coronavirus. Denostar tan salvajemente, y sin rigor científico ni epidemiológico, esas medidas es a todas luces pretender que “convivamos” con un virus que solo enferma y mata, añaden los políticos de Formosa contra el pedido de intervención.
Asimismo, el Gobernador de Formosa, Gildo Insfrán ratificó la política sanitaria contra el coronavirus durante una conferencia de prensa junto al Ministro de Educación de la Nación, Nicolas Trotta, al asegurar que “el único enemigo que tenemos es el virus” y convocó a la unidad del pueblo de Formosa.
“No me importa perder una elección si tengo que salvar la vida de un formoseño”. Gildo Insfrán, Gobernador de Formosa.
Formosa, fue una de las primeras provincias en retomar las clases durante el ciclo lectivo pasado dado el bajo nivel de contagio y casos de coronavirus. Gildo Insfrán junto a Trotta evaluaron la situación epidemiológica y las clases comenzarán el 2 de marzo, un día antes de que el Gobernador abra las sesiones ordinarias y pronuncie su discurso en la Legislatura.
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