El poder ejecutivo paraguayo, encabezado por Mario Abdo Benítez, promulgó desde el pasado viernes, el uso obligatorio de barbijo en todo el territorio nacional.
Esta medida viene como consecuencia de una batería de propuestas de Presidencia de la Nación para la nueva normalidad propuesta desde mediados de octubre, con el levantamiento de la cuarentena, la reapertura de fronteras y el regreso de los vuelos internacionales en el país.
La Ley N° 6.655 establece que es “obligatorio el uso de barbijo o tapaboca en todo el territorio nacional en lugares abiertos y, además, en dependencias comerciales cerradas, tanto públicas como privadas” contemplando sanciones a quienes incumplan las medidas.
Medidas similares a las de Argentina
Para contextualizar, muchas de las provincias argentinas, especialmente las del NEA, establecieron una norma muy similar como medida preventiva frente al COVID-19.
La diferencia radica en la anticipación de las decisiones por parte de Argentina. En este caso particular, la reglamentación se produjo entre los meses de abril y junio de este año. Recordemos que este tipo de medidas son complementarias con las del Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio (DISPO), acciones tomadas mientras se aguarda la vacuna contra el COVID-19.
Polémicas en la implementación de la medida
El ejecutivo paraguayo tuvo que realizar distintas modificaciones a la primera propuesta, ya que en muchos casos existían claroscuros que debían reformularse para tener una ley más clara y precisa a la hora de la implementación en territorio.
El asesor jurídico del Presidente, el abogado Hernán Huttemann, se encargó de profundizar y darle un carácter más específico a la legislación.
Uno de los ejemplos era el uso del barbijo obligatorio en espacios cerrados: el primer borrador establecía su uso en locales comerciales, pero quedaba librado a la interpretación el hecho de si era imperativo para el propietario o empleado o si las personas que ingresaban debían usar el tapabocas o no.
Todas estas dudas llevaron a los asesores legales a modificar y exponer que las norma era para cualquier persona que circule en territorio paraguayo y además, especificando que en lugares cerrados donde no se garantice la distancia de 2 metros, también sea obligatorio el uso de barbijo.
Aprobación ciudadana
Este tipo de medidas suele causar un impacto inmediato en la cotidianeidad de las personas. En este caso, el uso de un accesorio preventivo como el barbijo o tapaboca, pudo haber ocasionado una suerte de rechazo de los ciudadanos.
En contrapartida de lo que algunos sectores opositores plantean, las encuestas realizadas por los centros estadísticos del Paraguay, más del 70% de la población está de acuerdo con la nueva Ley promulgada por el Presidente Mario Abdo Benítez.
Paraguay encara su segundo mes de vuelta a la normalidad con vistas a las festividades navideñas. Esto, teniendo en cuenta que las reuniones al aire libre pueden llegar hasta 50 personas y se planea un ascenso de ese número hasta las 150 e incluso, si la situación epidemiológica acompaña, hasta 1.000, pensando en el sector del entretenimiento.
El camino establecido por las autoridades paraguayas parece dar buenos resultados en términos de contagios, teniendo en cuenta que la curva se mantiene achatada, siendo 600 los casos diarios promedio, siendo el número más bajo de la región sur del continente.
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