A un año de la sanción de la Ley Bases, el Gobierno de Javier Milei avanza con un nuevo paso en su plan de desguace del Estado: la disolución de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV). Este martes 8 de julio, con la vigencia aún activa de las facultades delegadas al Ejecutivo, se publicaría el decreto que liquida uno de los organismos más antiguos e importantes del país, creado por ley en 1932.
El impacto no solo será simbólico: más de 5.000 trabajadores quedarían fuera del sistema, se paralizarían tareas de mantenimiento y construcción en más de 9.000 kilómetros de rutas nacionales y la seguridad vial quedaría en manos de Gendarmería, un cuerpo sin experiencia ni formación técnica en obras viales.
Cierran Vialidad Nacional, un organismo que garantiza la logística para que nuestros diezmados sectores productivos sean competitivos.
5 mil compatriotas sin trabajo. 47 millones, sin obras.
Odian al Desarrollo. Odian al Progreso. Odian a la Argentina.pic.twitter.com/mn1WMnIVYI
— Agustín Rombolá (@agustindrombola) July 7, 2025
Misiones: incertidumbre para 140 familias viales
En Posadas, los trabajadores del distrito Misiones de Vialidad Nacional se movilizaron este lunes para visibilizar la gravedad del anuncio. “No sabemos qué va a pasar con nosotros”, resumió Aldo René Ayala, secretario del Sindicato de Trabajadores Viales. La provincia perdería a más de 140 empleados especializados, clave para el mantenimiento de la Ruta Nacional 12 y 14, fundamentales para la conectividad regional.
“Se frenaron todas las obras desde que asumió este gobierno, y ahora directamente se disuelve el organismo. La situación es crítica”, advirtió el trabajador misionero.

Formosa: sin mantenimiento y con rutas al borde del colapso
El administrador de la Dirección Provincial de Vialidad de Formosa, Javier Caffa, fue tajante: “El Estado está abandonando su rol”. Denunció que las rutas nacionales en la provincia sufren un deterioro acelerado por la falta de mantenimiento, y que incluso la Justicia federal ordenó su reparación urgente.
“El decreto busca achicar el Estado, pero no deja de cobrar los impuestos específicos para el mantenimiento vial. Esa es una estafa institucional”, sostuvo el funcionario. Formosa tiene más de 1.200 kilómetros de rutas nacionales en funcionamiento, con tareas esenciales totalmente paralizadas.
Chaco: obras públicas en suspenso, mientras se preparan licitaciones sin operadores
En Chaco, la Dirección Nacional de Vialidad había cerrado hace apenas días las Audiencias Públicas para la Etapa III de la Red Federal de Concesiones. Con la posible disolución del organismo, quedan en suspenso 3.900 kilómetros de rutas por licitar, incluidos los tramos clave de la RN 11 y la RN 16.
Más de 450 actores participaron de las audiencias, desde intendentes hasta usuarios de rutas. Ahora, ese proceso corre riesgo de quedar sin ejecución, mientras las rutas del Chaco presentan zonas con baches, falta de señalización y obras sin terminar.

Corrientes: la autovía RN12, una obra clave que podría quedar trunca
En Corrientes, la llamada Autovía 12 avanza a paso lento y con retrasos que Vialidad Nacional había atribuido a las lluvias. La reactivación de la obra en enero, que luego volvió a ser paralizada, pareció ser una de las pocas buenas noticias para los usuarios de las rutas.
Eliminan Vialidad Nacional
En Corrientes, quien va a atender los más de 1.000 kilómetros de rutas nacionales no concesionadas?UNA LOCURA pic.twitter.com/xNQ4OT9yL5
— MARTIN Barrionuevo (@mmbarrionuevo) July 7, 2025
El proyecto incluye duplicación de calzada, colectoras e intersecciones en un tramo vital para conectar la capital provincial con Misiones y Paraguay. Con el cierre de la DNV, esa obra —ya frenada durante dos años— podría quedar nuevamente paralizada.

El impacto en el NEA: rutas sin obras y trabajadores sin futuro
El cierre de Vialidad Nacional golpea con fuerza al noreste argentino. En Misiones, Corrientes, Chaco y Formosa hay más de 4.000 kilómetros de rutas nacionales, muchas de ellas con tareas de mantenimiento activas o previstas. También hay proyectos en curso como la Red Federal de Concesiones, que representan el 20% de la red vial nacional y concentran el 80% del tránsito del país.
La disolución de vialidad nacional no solo pone en jaque la conectividad, la seguridad vial y el desarrollo económico de la región. También deja a cientos de trabajadores en la calle, muchos con décadas de experiencia en una tarea esencial para el país.
El cierre de la Dirección Nacional de Vialidad no es solo un hito más en el ajuste. Es el símbolo de un Estado que decide retirarse de su responsabilidad básica: garantizar la infraestructura que conecta a sus ciudadanos. Sin rutas seguras, no hay producción, no hay transporte, no hay turismo, no hay desarrollo. Y lo más grave: no hay quien reclame por esos caminos cuando el Estado abandona su rol.
ADEMÁS EN NEA HOY:
Adorni anunció la disolución de Vialidad Nacional y la concesión de 9.120 kilómetros de rutas










