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Sábado 08 de febrero de 2025
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¿Qué dejó el préstamo del FMI a Macri y qué puede traer el nuevo acuerdo con Milei?

El préstamo otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) al gobierno de Mauricio Macri en 2018 fue uno de los acuerdos más grandes en la historia del organismo con Argentina. El país no terminó de pagar esa deuda, pero Javier Milei quiere sacar un nuevo préstamo.

El préstamo otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) al gobierno de Mauricio Macri en 2018 fue uno de los acuerdos más grandes en la historia del organismo con Argentina. El país no terminó de pagar esa deuda, pero Javier Milei quiere sacar un nuevo préstamo.

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El 3 de enero de 2006 Néstor Kirchner canceló una deuda por $4244,55 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional, el famoso “FMI”. Desde ese entonces, Argentina tuvo una época de desendeudamiento hasta el 7 de junio de 2018, cuando el FMI le prestó al Gobierno de Mauricio Macri 44.500 millones de dólares. Argentina aún está pagando esa deuda, pero el Gobierno de Javier Milei está en tratativas para un nuevo préstamo.

El préstamo de Macri

Poco se sabe de la historia del préstamo de la Presidencia de Mauricio Macri. Con la promesa de estabilizar la economía y reducir el déficit fiscal, se recibió un monto de casi 45 millones de dólares, sin embargo pocos resultados se vieron de eso. Uno de los primeros en señalar las irregularidades de este préstamo fue el ex Ministro de Economía Martín Guzmán, que explicó que el préstamo se otorgó en un contexto donde las condiciones no permitían pensar que Argentina tendría capacidad de repago.

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Según él, el acuerdo fue un “fraude histórico” que favoreció a intereses políticos y financieros internacionales, pero que perjudicó de forma irremediable a la población argentina. Este préstamo no fue utilizado para promover el desarrollo económico del país, sino que aparentemente se usó para evitar la reestructuración de la deuda externa y financiar la fuga de capitales que había ocurrido durante la gestión de Macri.

Además, se entregaron fondos sin las garantías de sostenibilidad necesarias cuando Argentina ya estaba mostrando señales de una crisis económica. El FMI otorgó un préstamo superior al 1.000% de la cuota de Argentina en el organismo, sin cumplir con los requisitos de que el país tuviera acceso a los mercados internacionales de crédito ni la capacidad de repago que justificaría una deuda de tal magnitud.

Lo que algunos expertos sostienen es que el Gobierno de Mauricio Macri necesitaba “dólares frescos” para evitar una crisis financiera inminente. Ésto, acompañado de las políticas de ajustes del período, causó un estancamiento económico, aumento de la inflación y un aumento de la pobreza.

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Christine Lagarde, la entonces Directora Gerente del FMI y Mauricio Macri en 2018.

Cuánto debe Argentina en la actualidad

De acuerdo con el último informe oficial disponible, al 30 de noviembre último nuestro país debía $42.845 millones de dólares al FMI. Originalmente, el acuerdo que el Gobierno de Mauricio Macri firmó con el FMI era por $50.000 millones de dólares, pero en septiembre de 2018 se renegocia y el monto se amplió a un número cercano a los $57.000 millones de dólares.

Pero Argentina no recibió todo ese dinero. Luego de las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que ganó Alberto Fernández y el posterior salto del dólar, el FMI decidió suspender los últimos desembolsos, por lo que la Argentina recibió poco más de $44.000 millones de dólares, cerca de un 78% del monto total del acuerdo. A pesar de todo, el acuerdo de 2018 fue el más alto en la historia de los préstamos acordados entre el FMI y el Estado argentino.

La crítica del FMI a las políticas de Macri y la luz verde a Milei

El Gobierno de Javier Milei tomó esta posta de ajuste del Gobierno de Mauricio Macri y continuó la carrera. Solamente que el ajuste de éste es mucho más radical. ¿Por qué importa el tema del ajuste? Básicamente porque éste tipo de medidas son las que exige el FMI para sus préstamos. Coloquialmente hablando y haciendo una comparación sencilla, alguien que le presta plata a un vecino lo quiere ver ahorrando para pagarle.

El FMI, en lugar de cuestionar estas políticas, las ha aplaudido. En varias declaraciones públicas, Julie Kozack, portavoz del Fondo, ha elogiado las reformas implementadas por el gobierno de Milei, destacando la reducción de la inflación y el superávit fiscal como «logros importantes». Según el FMI, estas políticas están «en la dirección correcta», y de hecho más de una vez se ha mencionado que el Presidente “cumplió más de lo que le pedían”.

El Ministro de Economía, Luis Caputo, no ha ocultado su intención de obtener más fondos del FMI para «fortalecer las reservas» del Banco Central y «mantener la estabilidad cambiaria». En sus declaraciones más recientes, Caputo dejó claro que están negociando un nuevo acuerdo con el FMI. Sin embargo, como el propio funcionario reconoció, el tema central no es tanto la cantidad de dinero que se reciba, sino el tiempo en que se entreguen esos fondos. 

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Luis Caputo se reunió con la nueva Directora Gerente del FMI, Kristalina Georgieva.

2025: un nuevo préstamo

La llegada de un nuevo préstamo del FMI bajo la presidencia de Milei es, al igual que en el caso de Macri, una oportunidad para que el gobierno obtenga fondos frescos, pero a costa de más sacrificios sociales. Las promesas de «austeridad», «reformas estructurales» y «control de la inflación» que han hecho tanto Macri como Milei suenan tentadoras para el FMI, pero en la práctica significan mayores ajustes.

Se suele hablar de la planilla de excel del Gobierno para referirse a los números que manejan. Pero los números, cuando se trasladan a la vida real, significan una consecuencia directa sobre la calidad de vida de los argentinos. Cuando el gobierno recorta los subsidios a los servicios públicos o reduce el gasto social, significa que el ajuste recae en la población, a diferencia de la “casta”. 

Otro tema importante es que la inflación, que sigue siendo un problema estructural en Argentina, no cede a pesar de los esfuerzos por reducir el déficit fiscal, y el ajuste continúa. Lo que está en juego no es sólo la cantidad de dinero que recibe el país, sino el costo social de esas decisiones.

Se cree que el préstamo de Macri, en vez de ser una solución para la economía Argentina, se utilizó para cubrir los costos de fuga de capitales y ahora, el mismo Ministro de Economía de ese momento, Luis “Toto” Caputo presenta el mismo plan. Todo indicaría que el mismo patrón de endeudamiento y ajuste podría repetirse con Milei.

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