Una fuerte tensión se desató en el ámbito interno de la Policía de Corrientes tras la decisión de la Jefatura de pedir a los agentes un informe psicodiagnóstico y otros estudios médicos como el “electroencefalograma” con mapeo cerebral, extendidos por “licenciados ajenos a la institución”.
La nueva normativa se dio a pocos días del crimen del oficial subayudante Alfredo Molina, hijo del Jefe de la Policía, Arnaldo Molina, a manos de otro agente policial llamado David Medina. Tanto Molina como su asesino integraban el grupo de Delitos Complejos de la Policía de Corrientes.
También sirven de contexto otras situaciones de violencia institucional y abuso del poder policial que se dieron a conocer en las últimas semanas, aunque tienen vieja data.
“Como en todas las fuerzas, para el ingreso a la Policía te piden esos estudios. Siempre se hizo”, comentó a NEA HOY una fuente interna e indicó que “hay un descontento en la fuerza por el tema de que los policías tienen que pagarse esos estudios” mientras que la institución posee a sus propios profesionales y estos “tranquilamente, pueden encargarse de eso”.
Asimismo, señalaron que en los últimos días, los mismos efectivos hicieron circular un mensaje en los grupos de WhatsApp en los que se quejan duramente de la decisión que tomó la cúpula policial.
«El problema no es que se hagan los exámenes, sino que, teniendo profesionales dentro de la institución, tengan que pagar los policías ese costo»
“¿No debería hacerse cargo la Policía de Corrientes de su propia tropa, de los estudios, psicológicos, psiquiátricos y demás yerba?”, se puede leer en una parte del descargo que fue difundido entre los agentes.
Además, consideraron que “con ese criterio, en cada accidente o hecho cotidiano que involucre a un personal policial, deberían someter a toda la fuerza a rigurosos exámenes”.
A su vez, en el reclamo se colaron otros temas que generan repudio en el ámbito interno como son las irregularidades en la selección de ingresantes a la fuerza y el reclutamiento de agentes que no pasaron por el curso introductorio.
“Están empujando a la fuerza, como ya lo vienen haciendo con presiones psicológicas, con la presión económica de pagar estudios que rondan los 90 mil pesos que nadie tiene»
“Están empujando a la fuerza, como ya lo vienen haciendo, con presiones ahora no sólo psicológicas, como los traslados injustificados, provocando el desarraigo familiar doloroso, con las consecuencias psicológicas que eso provoca, sino también con la presión económica de pagar estudios que rondan los 90 mil pesos que nadie tiene”, expusieron los oficiales.
Por último, los efectivos reclamaron que sean los funcionarios de los primeros puestos jerárquicos quienes se sometan a los estudios psicológicos y los muestren públicamente.
Cabe acotar, según información reciente a la que accedió NEA HOY, que el salario promedio de un efectivo de la Policía de Corrientes (con un hijo) ronda los $531.000. Es decir que, quienes no tienen hijos, reciben un haber menor.
Además, ese sueldo es abonado en tres partes: el sueldo neto constituye $490.000 aproximadamente, otro monto se otorga en carácter de “Neto Plus Remunerativo” ($33.500) y se completa con el “Neto Plus de Refuerzo” (que equivale a $30.000).
En ese marco económico crítico que acarrean los agentes de la Policía de Corrientes, las autoridades elegidas por el Gobernador Gustavo Valdés, en sintonía con el Ministerio de Seguridad provincial, decidieron, arbitrariamente, la realización de los test psicológicos por fuera de la institución que despertó una ola de reclamos.
Sin embargo, hasta el momento, no se conoció una respuesta oficial de la cúpula policial y, tanto los ingresantes a la fuerza, como los agentes (excepto los que se hallen en término de ascenso al grado inmediato superior), deberán afrontar el costoso estudio.
ADEMÁS EN NEA HOY:
Los agentes de la Policía de Corrientes deberán hacer un test psicológico obligatorio