La Inteligencia Artificial (IA), sobre todo en lo que respecta al chat GPT-4, está revolucionando el orden establecido en diferentes ámbitos de nuestra realidad; las relaciones sociales, el desarrollo de un oficio o profesión, los ambientes laborales en general, la educación, la política y muchos otros estratos.
Esto produjo que, en las últimas horas, científicos de la categoría de Elon Musk, Stephen Hawking y Bill Gates, entre otros, pidieran frenar por seis meses los avances de esta herramienta, mientras se trabaja en una legislación al respecto.
En diferentes partes del mundo, este pronunciamiento generó polémica entre quienes apoyan la restricción y quienes la rechazan y, a la vez, desconfianza de muchas personas por la potencialidad que podría tener esta herramienta; tanto para bien como para mal.
Para conocer a fondo sus bondades y aspectos negativos, NEA HOY conversó con el correntino Nahuel Hollman, analista en sistemas y profesor de computación, que fue seleccionado entre los “10 docentes innovadores” el año pasado.
Al respecto del avance de la IA, el analista opinó que, si bien se encuentra evolucionando hace varios años en el ámbito científico, fue el chat GPT-4 el que permitió a las personas comunes acceder a sus capacidades más llamativas.
“La sociedad tiene que ser responsable en el uso de la IA, porque esta tecnología tiene un gran impacto en nuestra vida cotidiana”
En su rol de docente y miembro de la Subsecretaría de Contenidos Audiovisuales del Ministerio de Educación provincial, Hollman añadió que “se está avanzando sobre la concientización del uso ético de la IA y profundizando en la mirada de esta herramienta como algo productivo y no como un ‘cuco’, para que estudiantes y docentes la aprendan a utilizar de manera efectiva”.
Vale mencionar, como lo remarcó el docente, que el revuelo por la IA surgió en febrero del año pasado y, aún, Corrientes, como otras provincias del país, no cuentan con una “bajada oficial” para enseñarlas o promoverlas en los espacios de enseñanza formal o de innovación.
Sin embargo, es conocido por una gran parte de la población que el Chat GPT-4 permite crear imágenes que se asemejan mucho a una tomada en la vida real. Como sucedió con las fotos del Papa Francisco que fueron creadas y viralizadas por un hombre estadounidense de 31 años, conocido como Pablo Xavier.
También se encuentra entre sus capacidades la posibilidad de redactar notas, informes, generar campañas de marketing, solucionar problemas de índole económica, traducir textos, videos, mejorar la calidad de estos últimos, entre otras tantas cosas.
Chat GPT-4: quién lo creó y cómo se usa
Nahuel Hollman señaló que el chat GPT-4 fue presentado por el Laboratorio Open AI y tiene que ver con un modelo de lenguaje de inteligencia artificial que utiliza las redes neuronales para generar texto, que se encuentra entrenado con gran cantidad de datos con el fin de responder preguntas, completar oraciones y generar textos coherentes y naturales, asemejándose al lenguaje humano.
“Para ingresar a la plataforma se debe acceder al sitio de Open AI, el cual pide un usuario y una contraseña para registrarse. Una vez dentro, se debe acceder a un playground que habilita el chat para poder realizar la consulta o el pedido que se tiene en mente”, contó.
¿Sería correcto detener el avance de la IA?
Consultado al respecto, el analista y docente correntino comparó la situación con la del origen de internet: “nadie se imaginó que, después, a consecuencia del internet, iban a ocurrir muchas cosas buenas, así como las malas. Creo que con la inteligencia artificial está sucediendo lo mismo y tiene mayor impacto porque una gran parte de la población mundial puede acceder a ella y sacar provecho”.
Por otro lado, Hollman planteó que la limitación del avance de la IA durante un periodo de seis meses podría resultar inútil ya que es difícil lograr una legislación eficaz en ese marco de tiempo.
“Hay un montón de cosas malas que tiene Internet sobre las que todavía no se legisla, sobre todo en lo que respecta a delitos web, y no creo que en cinco meses se pueda lograr una legislación para la IA”, consideró el docente.
“La sociedad tiene que ser responsable en el uso de la IA, porque esta tecnología tiene un gran impacto en nuestra vida cotidiana, y puede tener consecuencias tanto positivas como negativas. La ética, la justicia, la privacidad y la seguridad son aspectos fundamentales que se deben tener en cuenta en su desarrollo y uso”, opinó.
En esa línea, sostuvo que la IA “ya está entre nosotros y hay que darle una mirada positiva. Si la vemos como un ‘cuco’ todo va a pasar por esa mirada negativa”. A la vez, consideró que la alternativa a prohibir su avance por los próximos meses podría ser, solamente, reducir la velocidad de su evolución.
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