La gestión del Gobierno nacional inició con 21 ministerios de los cuales solo cuatro eran dirigidos por mujeres y un discurso de paridad de género de puertas abiertas a los feminismos que trajo, entre otras cosas, la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) en plena pandemia por COVID-19.
Sin embargo, los resultados de las PASO no fueron los esperados provocando un cimbronazo en el Frente de Todos. Así, ingresaron diferentes hombres a liderar los ministerios como el caso de Luis Manzur, Gobernador de Tucumán ahora en licencia, exministro de Salud de la Nación y conocido por su postura encontra del aborto, a ocupar el cargo de Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación.
Estos recientes cambios definitivamente alejaron la posibilidad de que haya más presencia de mujeres en lugares de decisión política. Ahora solo son dos: Elizabeth Gómez Alcorta, ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad; y Carla Vizzotti, que asumió como ministra de Salud tras la renuncia de Ginés González García. Claro que también permanece la líder indiscutida del movimiento político peronista, Cristina Fernández de Kirchner como vicepresidenta.
¿Qué pasará con las políticas públicas con perspectiva de género? ¿Los valores de Manzur impactarán negativamente en el acceso a los derechos de las mujeres? ¿Existe un compromiso real de quienes gobiernan por ceder espacios de poder a las mujeres e identidades LGBTI+?
Nuestros derechos en resguardo
Al conocerse quienes ingresarían al Gabinete nacional, los diferentes movimientos de mujeres de todo el país alzaron la voz en repudio de la notoria desigualdad de género en los altos cargos ministeriales y en consideración de que las políticas públicas con perspectiva de género aplicadas por la gestión del Frente de Todos se encontraban “en peligro”.
Uno de los casos, fue el del colectivo de Actrices Argentina que sacó un comunicado:
View this post on Instagram
No obstante, rápidamente, la titular de la cartera de Mujeres tras un encuentro con el Presidente, aseguró en su cuenta de Twitter: “Como desde el 10 de diciembre de 2019, seguiremos trabajando todos los días para diseñar y fortalecer medidas que protejan y amplíen los derechos de las mujeres y LGBTI+, porque es prioridad absoluta de nuestro gobierno”.
Desde entonces, Gómez Alcorta no paró de realizar actos públicos en los que resaltó el discurso del compromiso con las mujeres que tiene este Gobierno y avanzó con un proyecto de decreto para promover la igualdad de género en las designaciones de funcionarias y funcionarios de los ministerios del Poder Ejecutivo Nacional.
Además, presentó el Programa Igualar que tiene como propósito reducir las desigualdades de género en el mundo del trabajo, el empleo y la producción; y el Programa Registradas para el reconocimiento de trabajadoras de casas particulares.
Es que nuestro país no solo posee altas tasas de violencia de género y femicidios -para los cuales el Estado creó líneas programas específicos de asistencia a víctimas-, sino también existen otras problemáticas como son la pobreza y el desempleo.
Según estadísticas oficiales, las mujeres son jefas de familia y sostén económico en más del 50% de los hogares del país; siendo las mujeres de provincias del NEA, las más pobres.
Estos datos son también la razón por la que Alberto Fernández creó el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad: para impulsar desde allí políticas públicas como el cupo laboral trans, la inclusión de mujeres en el empleo y la eliminación de la desigualdad salarial de las mujeres.
En este sentido, es que la gestión del Frente de Todos tiene claro que, para sacar al país adelante, necesita de las mujeres. Por eso, el Estado nacional desde que asumió, impulsa empleo, líneas de financiamiento para producción y asistencia económica, jubilaciones y reconocimientos para las mujeres.
Somos un gobierno que está y estará del lado de las mujeres y LGBTI+. Fue ese nuestro compromiso cuando asumimos y lo honraremos cada día trabajando sin descanso. La vida que queremos es con todas, todes y todos, con la igualdad y la justicia social como norte, siempre.
— Eli Gomez Alcorta (@EliGAlcorta) September 18, 2021
Manzur y sus ideas
El nuevo Jefe de Ministros nació en Tucumán y se recibió de doctor en medicina a los 22 años. Siempre se supo que es una persona católica, practicante y, en sus discursos como en sus políticas políticas en los diferentes cargos que ocupó, expresó su postura religiosa y en contra de derechos como el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo.
Como cuando se desarrolló como Ministro de Salud de la Nación en 2009 durante la gestión de Fernández de Kirchner y lugar desde el que se negó a darle rango ministerial a la guía para la interrupción legal del embarazo.
Asimismo, como Gobernador de su provincia -cargo que ocupó desde 2015 y fue reelecto en 2019 hasta ahora que se encuentra en licencia-, encabezó una cruzada contra el debate de la Ley IVE. Algo similar ocurrió con dirigentes políticos del Chaco, Formosa, Misiones y Corrientes.
Otra de las razones por las que hoy Manzur no es bien recibido por los feminismos es a raíz del caso de Lucía, una niña que fue abusada y obligada a gestar porque el sistema de salud de Tucumán puso trabas para que pudiera acceder a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) -un protocolo vigente desde 2012 en el país- para casos de violación.
Fue tal el quiebre que, el actual Jefe de Gabinete, recibió una denuncia penal de una organización de derechos humanos en 2019, en la que una de las impulsoras es Gómez Alcorta, por “obstruir el acceso al aborto legal de la niña que había sido agredida sexualmente”.
Los médicos que lograron practicarle la cesárea a Lucia, fueron denunciados penalmente por realizar la práctica. Luego, la Justicia obligó al Estado tucumano a garantizar vivienda y una vida digna a la niña.
En ese momento, no fue precisamente un Gobernador comprometido con la vida de Lucía ni el facilitador del acceso a la ILE de la niña, solo cuando el caso tomó relevancia internacional, tomó medidas y ordenó al Ministerio de Salud cumplir con los protocolos.
“El caso Lucia demostró en Tucumán que no hubo ni una institución que preservara los derechos de la Niña, refiriéndose a la objeción de conciencia”, argumenta @Sole_Deza en el debate#AbortoLegalEsSalud pic.twitter.com/3AXiXHuwD3
— 27.610 #EsLey 💚 (@CampAbortoLegal) December 2, 2020
A pesar de esto, se puede reconocer que produjo avances en la Salud Pública como la incorporación de vacunas en el calendario; impulsó en 2009 el Plan Nacional de Prevención y Control del Dengue y la Fiebre Amarilla para que en el NEA no hubiera víctimas fatales por esas enfermedades y facilitó la inversión en infraestructura e investigación para tratamientos médicos de dengue, fiebre amarilla y chagas.
Asimismo, mantuvo estrecha relación con la actual vicepresidenta. Por esto, no fue sorpresa cuando ella decidió que Manzur fuera elegido para comandar el Gabinete nacional, aunque no es el perfil de político que el feminismo peronista aprueba.
Por nuestra parte, desde los diferentes feminismos, debemos asumir el compromiso de seguir trabajando -y militando- por un efectivo cumplimiento de leyes que protejan los derechos de las mujeres, las identidades LGBTI+, las infancias y los pueblos originarios.
De todas maneras, no quedan dudas de que existe un compromiso del Gobierno nacional hacia las mujeres y los derechos consagrados a través de tratados internacionales de rango constitucional.
