El papa Francisco fue internado este viernes para realizarse algunos exámenes diagnósticos necesarios y continuar con un tratamiento tras padecer bronquitis.
«Esta mañana, al término de sus audiencias, el papa Francisco ha sido ingresado en el Policlínico Agostino Gemelli para someterse a algunas pruebas diagnósticas necesarias y continuar su tratamiento contra la bronquitis, que sigue en curso, en un ambiente hospitalario», informaron desde el Vaticano.
Además, se indicó que Francisco, de 88 años, ingresó al centro médico después de sus audiencias matutinas luego de que en los últimos días evidenció dificultades respiratorias y debió solicitar a sus asistentes que leyeran algunos de sus discursos.

El pasado miércoles, durante su audiencia general en el Vaticano, el Papa le pidió a un sacerdote que continuara con la lectura de su mensaje al señalar: «Déjenme pedirle al padre que continúe leyendo porque aún no puedo con mi bronquitis. Espero que la próxima vez pueda».
La falta de aire de Francisco
Días atrás el papa Francisco, agobiado por falta de aire, dejó de leer una homilía este lunes, informaron medios internacionales. El malestar de Francisco se dio durante la misa del Jubileo de las Fuerzas Armadas. El Sumo Pontífice transfirió entonces el rol a un ayudante. Padece de bronquitis, según ANSA Latina.
«Ahora me disculpo un poco, y pido al maestro que continúe la lectura, por dificultad en el aliento», dijo aplaudido por los 30.000 militares presentes en la Plaza de San Pedro, de los cuales 20.000 son de Italia y otros de más de 100 países.

A mediados de enero último, sufrió una caída en la Casa Santa Marta, ubicada dentro del Vaticano, y se lastimó el brazo derecho. Según informó el portavoz del Vaticano, el pontífice no sufrió fracturas, pero como medida preventiva, se le colocó un cabestrillo. Esta caída llega pocas semanas después de otro incidente similar, en el que Francisco se golpeó la barbilla.
A pesar del accidente, el papa no sufrió más que un gran moretón, lo que le permitió seguir con su agenda de actividades programadas. El hecho ocurrió en la misma residencia donde el papa Francisco reside habitualmente, la Casa Santa Marta. El comunicado del Vaticano informó que el pontífice sufrió una contusión en su antebrazo derecho, pero no se registraron fracturas.
A pesar de la caída, Francisco continuó con su agenda del día, siendo visto en audiencias con el brazo inmovilizado. Esta caída se suma a la ya conocida lesión en la barbilla que sufrió en diciembre pasado, cuando se golpeó contra una mesita de noche. En esa ocasión, el papa sufrió un moretón importante, pero también logró continuar con sus actividades.
Fuente: LM Neuquén
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