Tras semanas de intensas negociaciones y manifestaciones, los trabajadores de la salud de la provincia de Misiones alcanzaron un acuerdo salarial con el Gobierno provincial que ofreció un aumento del 12,5% en el salario básico.
El consenso se logró esta mañana en una reunión en el Ministerio de Salud en la que participaron en representación del estado misionero el ministro de Hacienda, Adolfo Safrán, y el ministro de Salud, Héctor González, mientras que por los trabajadores estuvieron ATE, UPCN y los secretarios generales de las seccionales de ATE San Vicente, Eldorado, Iguazú y Oberá.
Luego de la reunión los representantes se reunieron con los trabajadores que acampaban fuera del edificio. Además de la propuesta realizada por el Gobierno se abordaron otros temas como las condiciones de los jubilados, los pases a planta permanente y la garantía de que no habrá sanciones ni descuentos por las medidas de fuerza. Finalmente, la asamblea decidió aceptar la propuesta de manera mayoritaria.
Juan Pasaman, dirigente de la CTAA en la provincia confirmó que, una vez que el acuerdo esté formalmente firmado, las medidas de fuerza se suspenderán y los trabajadores retomarán sus actividades normales en los hospitales a partir de mañana. Asimismo, destacó que si bien “el aumento no cubre todas las expectativas” sin el paro no habrían logrado este avance significativo.
El personal de salud de Misiones celebró los avances en la negociación
“Celebramos que este conflicto, que no fue solo de salud sino también de otros sectores estatales como docentes y seguridad, haya resultado en un aumento salarial que supera la inflación del mes. Aunque todavía no recuperamos el poder adquisitivo de octubre, estamos más cerca de lograrlo”, comentó Pasaman.
“Recuperamos poder adquisitivo y, aunque no alcanzamos nuestro objetivo completo, este aumento es superior a la inflación proyectada para el mes”, finalizó. Los manifestantes comentaron que la calle Tucumán, frente al Ministerio de Salud de Misiones, será completamente liberada pasado el mediodía.
Fuente: Primera Edición
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